El Estado turco está movilizando tanto a Estados Unidos como a países europeos y potencias como Rusia contra el pueblo kurdo. Se esfuerza por atraer a su lado los diferentes extremos, aquellos con profundas contradicciones entre sí. En su estado actual, está dando prioridad y concentrándose en llevar a cabo el genocidio kurdo. Después de las elecciones de mayo de 2023, Erdoğan dijo a los diplomáticos turcos que se concentrarían en la diplomacia, multiplicarían sus amigos y aislarían a sus enemigos. Se está aplicando esta decisión. Están tratando de mejorar sus relaciones con todos los estados, incluida Grecia. Condescienden a visitar los países árabes. Cerraron el libro de señorear y mostrar palos como en el pasado. También están adulando a los Estados árabes para conseguir que fluya dinero de ellos porque su economía es mala. También han aumentado el comercio con Israel, han establecido relaciones de alto nivel y se han esforzado por ganarse el apoyo de estos círculos, incluidos los judíos de Estados Unidos.
Turquía ha desarrollado relaciones multifacéticas con Rusia, a quien se había enfrentado cuando Turqupia derribó un avión ruso. Al principio, Erdoğan intentó mantenerse firme, pero cuando su calibre se quedó corto, empezó a apaciguarlos y a hacer concesiones. Rusia obtuvo más concesiones de Turquía que nunca. Tanto es así que Erdoğan incluso compró misiles S-400 a Rusia como soborno. El Estado turco hizo todas estas concesiones y profundizó las relaciones para aplastar a los kurdos. Porque Rusia estaba en Siria y el camino estaba allanado para que los kurdos tuvieran un estatus. No había posibilidad de atacar e invadir Siria sin la aprobación y el apoyo de Rusia. La misma situación fue la misma para Irán. Por ello continuó con iniciativas como el proceso de Astaná. Y el proceso de Astaná se convirtió en un frente antikurdo. Al final, la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria fue declarada ilegítima en la declaración hecha después de esas reuniones. Acordaron sacar a Estados Unidos de Siria. Acordaron debilitar a las regiones autónomas y apoderarse o desactivar sus recursos energéticos. Los recientes ataques aéreos del Estado turco contra recursos energéticos están vinculados a estas decisiones.
Turquía utilizó la adhesión de Suecia a la OTAN como moneda de cambio contra los kurdos. Al final, Suecia y los países de la OTAN acordaron no apoyar a fuerzas como las YPG y limitar las actividades kurdas en Europa. Se levantó el embargo militar a Turquía. Estados Unidos acordó proporcionar aviones de combate F-16 y reparar los viejos. Ahora han aprobado un paquete de 23.000 millones de dólares. Canadá levantó el embargo sobre las cámaras que vendía a Turquía para UCAV y UAV. No sólo Canadá, sino también Escandinavia y todos los países europeos levantaron el embargo de armas. Estos acuerdos se reflejaron inmediatamente en la guerra en Kurdistán. Los dos últimos ataques del Estado turco fueron crímenes de guerra totales. Inutilizaron las fuentes de vida en Rojava. Se vieron afectadas centrales eléctricas, depósitos de trigo, etc. Los civiles fueron masacrados. Pero no hubo reacción de Estados Unidos, ni de los países europeos, ni tampoco de Rusia. Estos poderes no vieron ni hablaron. Sin embargo, ellos mismos están en Siria y saben bien lo que está pasando. Las fuerzas de las SDF, que aplastaron a ISIS, están siendo atacadas delante de sus ojos. También están abriendo su espacio aéreo a Turquía. El pueblo kurdo está siendo arrancado de sus tierras y obligado a migrar.
El Estado turco está utilizando las contradicciones y la crisis en Oriente Medio para eliminar a los kurdos. Por un lado, Erdoğan recibe al presidente iraní en Ankara y firma acuerdos económicos y de otro tipo. Por otra parte, firma la adhesión de Suecia a la OTAN. Por un lado, apoya a Hamás y despotrica contra Israel. Por otro lado, intenta mejorar sus relaciones con los dirigentes iraníes. Se sabe que Irán y Turquía tienen profundas contradicciones. Pero necesita que Irán aplaste al PKK y a los kurdos porque Irán tiene influencia tanto en Siria como en Irak. Irán es una potencia influyente en la región. Esta alianza también necesita una pierna kurda. Para ello ha preparado al KDP y está intentando activar a Hüda-Par y ENKS. Erdoğan está intentando unir a Rusia, Irán, Estados Unidos, Europa y los países árabes contra los kurdos y conseguir su apoyo. En este sentido, intenta construir una coalición mundial contra los kurdos.
El pueblo kurdo, los intelectuales y las fuerzas democráticas de Siria y Turquía deben elevar su unidad y lucha conociendo estos hechos. Hay que exponer las relaciones y alianzas sangrientas y oscuras, y los pueblos del mundo deben ser iluminados. Turquía lleva cien años insistiendo en esta política de aniquilación y negación. Mientras haya quienes resistan y luchen, todos estos planes se verán frustrados.
Fuente: Periódico Ronahi
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