Guerrilla Haki Zilan que sobrevivió al ataque del KDP en Xelifan: "Querían matarnos a todos"

El guerrillero Haki Zilan, que sobrevivió a la masacre del KDP de una unidad guerrillera en la región de Xelîfan, dijo: "El objetivo del ataque era no tomar prisioneros. Se trataba de matarnos".

Durante la noche del 28 al 29 de agosto, una unidad de siete guerrilleros en Xelîfan, al noreste de Hewlêr (Erbil), fue emboscada por el KDP, partido gobernante en Kurdistán del Sur (norte de Irak). Cinco de los guerrilleros murieron y otro miembro de las HPG aparentemente fue capturado herido. El combatiente de las HPG, Haki Zilan, que sobrevivió al ataque, habló con ANF y describió lo siguiente:

"Mi nombre es Haki Zilan. Estuve en el área de Qandil para algunas tareas. Una vez terminadas mis tareas, estaba listo para ir a la zona de Behdinan. Éramos siete guerrilleros que partimos hacia Behdinan. Dos de los compañeros en el grupo eran mensajeros. Antes de partir, nuestros compañeros de la oficina del comandante nos advirtieron: 'Tomen medidas contra cualquier provocación y problema'. Partimos en la noche del 23 de agosto. Las unidades del KDP ya habían atacado a tres de nuestros camaradas en la región de Bêxme de Xelîfan algún tiempo antes, y no habíamos sabido nada más de ellos. Debido a esto y a la sensible situación, estábamos muy cauteloso.

Llegamos hasta el río Zap sin problemas. Ibamos en la carretera de noche para no molestar a nadie y no ser vistos. Durante el día, paramos y observamos nuestro entorno. No nos acercamos a asentamientos civiles ni a puestos militares. Tomamos largos desvíos para hacerlo. Durante la noche del 28 al 29 de agosto llegamos al Zap. El lugar por donde llegamos al río era muy ancho y poco profundo. Elegimos este lugar para cruzar el río. Queríamos meternos en el agua y luego dirigirnos hacia las montañas Behdinan. Seguimos atentos hacia adelante y comprobando el terreno. No había bases ni puestos de control en la zona, ni del KDP ni de otras tropas.

El KDP abrió fuego sin previo aviso

Así que cruzamos el Zap y llegamos a la otra orilla. Heval Serdem estaba al frente. Era uno de nuestros mensajeros y caminaba por delante de todos los demás. Justo detrás de él venían Şoreş Colemêrg, Şoreş Mêrdîn, Tolhildan, Axîn y Brûsk. Yo caminaba detrás. No había mucha distancia entre nosotros. Nos alineamos como una columna guerrillera y partimos. Cuando apenas estábamos a cien metros del río, una lluvia de balas cayó sobre nosotros sin advertencia, gritos o disparos de advertencia. Estábamos inmovilizados. Nos habíamos alejado un poco del agua y había un campo llano frente a nosotros. No sabíamos quién nos había atacado en absoluto, los atacantes estaban posicionados en las colinas que dominaban el terreno llano. Nos disparaban incesantemente con armas pesadas.

El objetivo del KDP era matarnos

Realmente fue una emboscada muy traicionera. El objetivo de los atacantes no era detenernos o capturarnos, sino masacrarnos. Mientras sus balas llovían sobre nosotros, nuestros compañeros cayeron al suelo. Yo también me tiré al suelo. Mis compañeros Tolhildan, Axîn y Brûsk cayeron justo frente a mí. Estaban tan cerca de mí que les hablé, pero no respondieron. Estaban justo frente a mí, así que todas las balas los alcanzaron y yo salí ileso. Pude escuchar sus últimos suspiros. Estaba cerca de una formación rocosa y salté entre las rocas.

La primera lluvia de balas duró de 15 a 20 minutos y fue continua e intensa. Bajo este bombardeo, llamé en voz alta a Heval Şoreş y Serdem. Pero tampoco obtuve respuesta de ellos. Estaba completamente oscuro y era imposible ver tu mano frente a tu cara. Mi arma se me escapó de la mano en medio de la confusión. Cuando los compañeros no respondieron y el bombardeo fue solo unilateral, me di cuenta de que habían caído. Los atacantes siguieron disparándonos desde las 2:30 am hasta el amanecer. Estaba atrapado y no pude hacer mucho. Así que me retiré un poco y me camuflé. No podía verlos, pero podía oírlos bien. Por la mañana, al salir el sol, el silencio fue reemplazado por el sonido de los vehículos blindados del KDP. Me di cuenta por lo que decían, pero también por sus vehículos, que pertenecían al KDP. Llegaron directamente a la escena.

Luego se repitieron los disparos en el lugar donde nos habían emboscado y donde todavía estaban los compañeros. Se escucharon disparos de rifles de asalto M16. Después de eso, escuché nueve disparos y luego otros doce. Cada vez fueron disparos de un arma diferente. Si los ompañeros todavía estaban vivos, los remataron en ese momento. Después de eso, los disparos se detuvieron por completo.

Fue el recuerdo de los seis compañeros lo que me mantuvo en el camino de regreso. Siempre tuve la sensación de que estos compañeros estaban conmigo y me guiaban durante todo el camino. A veces caminaba por los senderos y hablaba intensamente con Heval Tolhildan. A veces, cuando estaba cansado por la noche, sentía a Heval Brûsk a mi lado. Sentir a estos amigos me dio la fuerza para luchar y seguir caminando. Mis ojos siempre estaban en los viejos caminos. Buscaba equipos viejos o zapatos de la guerrilla. Así que vagué por el terreno durante mucho tiempo. Después de caminar durante días, un día vi una lona debajo de un acantilado que parecía de la guerrilla. Recibí esperanza y me di cuenta de que ahora estaba cerca de los amigos. Ahora los estaba buscando en todos los valles. Entonces recordé lo que Heval Şoreş Mêrdîn me había dicho sobre su tiempo en la región del Mar Negro. Lo recordaba porque los amigos de la región del Mar Negro solían estar solos durante días o semanas. Ellos mismos atendieron sus heridas, tenían hambre y sed, pero continuaron luchando. Tomé esta importante experiencia como ejemplo.

Anteriormente había pasado dos días en el lugar donde me había camuflado. Luego me dispuse a llegar hasta la guerrilla. Decidí buscar compañeros en Behdinan. No conocía a Behdinan, pero tenía que contarles lo que había sucedido. Había perdido mis zapatos en la lluvia de balas y andaba descalzo. Corté la tela de mi ropa y la envolví alrededor de mis pies para poder caminar. Cuando estuve más lejos, pude ver el lugar de la emboscada desde la distancia. Allí no había ningún puesto militar.

Regrese con la guerrilla después de 16 días

Entré en un bosque. Un camino atravesaba el bosque. Mientras seguía el camino, de repente me encontré con dos compañeros debajo de un árbol. Este encuentro provocó en mí una alegría indescriptible. Me sentí como si hubiera renacido y recién ingresado al Partido. Estaba incluso más feliz que cuando me uní al Partido: '¿Son ustedes Hevals?' [Camaradas] Ellos respondieron: 'Sí, sí, somos Hevals'. Les hice a los dos amigos la misma pregunta una y otra vez. Luego les conté lo que había sucedido. Los compañeros se sorprendieron mucho de que hubiera logrado llegar. Les pregunté qué día y fecha era y me di cuenta de que había estado viajando durante 16 días. Fue una coincidencia muy significativa, porque uno de los amigos se llamaba Hêvî (Esperanza) y el otro Roj (Sol). Para mí, significó que iba hacia el sol, es decir, el partido, con mucha ilusión.

"Hay que dar a conocer el ataque clandestino de los colaboradores"

Está claro sobre qué base sucedió esta emboscada. El objetivo no era hacer prisioneros ni herir a los combatientes. Fue para destruir nuestro grupo y matar a sus miembros. Si eso no era lo que buscaban, al menos habrían dado una advertencia. Todos los miembros de nuestro grupo soñaron con ir a las montañas de Dersim, Serhad y Botan y luchar por un Kurdistán libre hasta su último aliento. Persiguieron esta intención en todas sus formas. Especialmente la juventud patriota y honorable del pueblo kurdo en Kurdistán del Sur, aquellos que recogen las armas de estos camaradas y defienden su causa, deben saber cómo estos colaboradores y servidores del estado turco lanzaron el ataque. Sobre esta base, toda la juventud kurda debería defender esta causa. Seguiré los pasos de los mártires hasta el final".