Desde el 27 de septiembre, Azerbaiyán ha estado atacando la región armenia de Artsaj con el apoyo de Turquía. Üyesi Jenya Qadir del Congreso Nacional del Kurdistán (KNK) de Armenia informa que Turquía ya había comenzado los preparativos para la guerra hace cinco o seis meses. En declaraciones a ANF, dijo: "Esta guerra no dependió de si Armenia la quería o no, porque el plan para tomar Artsaj ya se hizo de antemano entre Turquía y Azerbaiyán. En los últimos treinta años, ha habido una guerra entre las partes una y otra vez. Pero esta guerra es diferente de las anteriores. La diferencia es que esta guerra fue planeada y comenzada por Turquía. El estado turco quiere hacer cumplir prácticamente sus ambiciones en el Cáucaso a través de la guerra entre Azerbaiyán y Armenia. También sabemos que Erdogan quiere construir un sistema otomano-turanista. Por eso ataca e interviene en todas partes. Esta situación se ha convertido en una calamidad para la humanidad".

"La mayoría de la gente en Azerbaiyán no quiere esta guerra"

Qadir señala que Azerbaiyán no está preparado para la guerra: "Esto se debe a que el país tiene sus propios problemas. Una gran parte de la población del país no quiere esta guerra. Los pueblos ven que la guerra no la planea Azerbaiyán, sino Turquía. La guerra también se libra con mercenarios turcos y tecnología turca y está coordinada por Turquía. Más que Azerbaiyán, Turquía quiere poner a Artsaj bajo su control".

"Rusia pone la ventaja propia por encima de todo"

En cuanto al papel de Rusia, Qadir indica que las relaciones comerciales de los últimos años se han convertido en un medio para negociar concesiones mutuas a puerta cerrada. Advierte que Rusia podría seguir una política similar a la de Siria y Rojava: "El estado ruso no puede ser amigo de nadie y pone su ventaja por encima de todo lo demás. Si miramos atrás en la historia, podemos ver esto claramente. Rusia siempre siguió esa política hacia los pueblos de la región".

Amenaza de guerra extendiéndose

Qadir advierte de una extensión de la guerra a todo el Cáucaso y prosigue: "Rusia no puede responder por tal catástrofe. Sabemos muy bien que el estado turco no se va a detener y tratará de ocupar más áreas. Esperamos que Rusia no cometa un error tan histórico".

La miembro del KNK advierte que una invasión turca a Armenia significaría una repetición del genocidio de 1915: "La población armenia ha pensado erróneamente sobre los kurdos. Han considerado a los kurdos co-responsables del genocidio. Debido a esta percepción errónea, las relaciones amistosas con los kurdos no pudieron desarrollarse al nivel que hubieramos deseado. La nueva guerra muestra que los armenios y los kurdos tienen el mismo enemigo. Ambos pueblos deben unirse. Espero que el pueblo armenio sea consciente de esto. Rêber Apo (Abdullah Öcalan) dice que 'La coexistencia de los pueblos en la amistad y la fraternidad es de suma importancia'. Debemos tomar este paradigma como base”.

Üyesi Jenya Qadir finalmente explica que cada pueblo debe confiar en su propia fuerza y ​​creer en sí mismo y resistir en consecuencia: "Por el contrario, los estados solo actúan en su propio interés. En esta guerra, los armenios no deben depender de ninguna fuerza externa, sino de ellos mismos y asumir la responsabilidad de su propio destino".

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