La Administración Autónoma del Norte y Este de Siria afirmó que el Estado turco y sus mercenarios han obligado a miles de personas a huir de sus hogares desde que comenzaron los ataques el 9 de octubre. En concreto, miles de personas se vieron forzadas a abandonar Girê Spî y Serêkaniyê. Según la Administración Autónoma, al menos 300 mil personas han sido desplazadas.
El Consejo de Asuntos Sociales dijo que hasta ahora "159.721 personas han emigrado sólo a las provincias de Hesekê y Raqqa".
A finales de octubre, el Consejo de Asuntos Sociales dijo que el número de personas desplazadas era el siguiente:
Región de Cizîrê
Número de personas desplazadas de Serêkaniyê a Hesekê: 36.722
Número de personas desplazadas de Serêkaniyê a los pueblos del sur: 1.235
Número de personas desplazadas de Serêkaniyê y alrededores a Til Temir y las zonas rurales: 25.234
Número de personas desplazadas de los pueblos centrales y fronterizos de Amûdê a los asentamientos en el sur de la ciudad: 8.000
Número de personas desplazadas de la región de Cewadiyê en la frontera al sur de la ciudad: 4.000
El número de personas desplazadas de Dirbesiyê y sus alrededores al sur de la ciudad y a Hesekê: 11.630
Número de personas desplazadas de la frontera a los asentamientos al sur de Dêrik: 6.030
Número de personas desplazadas de Dêrik a Til Koçer: 1.335
Número de personas desplazadas de Qamishlo a los asentamientos del sur de la ciudad: 6.282
Número de personas desplazadas de Qamishlo a Til Hemis: 353
Número de personas desplazadas desde la frontera de Tirbesiyê hacia los asentamientos del sur: 5.000
Número total de personas desplazadas a Hesekê: 113,659
Región del Éufrates (Firat):
Número de personas desplazadas de Girê Spî a Raqqa: 10.200
Número de personas desplazadas de Eyn Isa a Raqqa: 2.500
Número de personas desplazadas de Girê Spî a las zonas rurales de Raqqa: 19.500
Número de personas desplazadas de Eyn Îsa y sus alrededores al distrito de Cirniyê: 973
Número de personas desplazadas desde la región septentrional de Eyn Isa hasta la región meridional: 2.500
Número de personas desplazadas de Girê Spî a Eyn Îsa: 6.000
Número de personas desplazadas de Siluk y sus alrededores a Eyn Îsa y Raqqa: 11.700
Número total de personas desplazadas al centro de Raqqa: 52.200
Número total de personas desplazadas a las provincias de Hesekê y Raqqa: 159.721
Cientos de miles de kurdos, árabes, armenios, asirios, turcomanos y chechenos que han sido desplazados forzosamente por el Estado turco, están siendo testigos del saqueo y la ocupación de sus hogares por parte de grupos terroristas y mercenarios bajo el control de Turquía.
Tanto las personas desplazadas como la Administración Autónoma recordaron a la comunidad internacional, especialmente a la ONU, que lo que se está perpetuando es un crimen de guerra.
Silva Mehmûd Mislim, que se vio obligada a emigrar de su casa en Serêkaniyê debido a los ataques del Estado turco y ahora vive, con 6 familias más, en una casa que ni siquiera tiene puertas y ventanas en el pueblo de Til Nisrî, en Til Temir. "Los turcos ocuparon nuestra casa. Queremos que Turquía abandone nuestros hogares. Necesitamos encontrar una solución que nos permita volver a nuestras casas", indicó a ANF.
Evîn Mistefa Bozan, que compartía la misma casa con Silva Mehmûd Mislim, tuvo que emigrar de Serêkaniyê. "¿Cómo vamos a volver mientras estén allí los mercenarios y los turcos? No confiamos en ninguna otra fuerza que no sea las YPG. Queremos volver a nuestros hogares y vivir como antes", señaló.
Una mujer árabe y su familia, Meryem Elî, que tuvo que emigrar de la localidad de Souda, entre Til Temir y Serêkaniyê, comparte una casa en ruinas con otras tres familias. "Mercenarios libres del ejército sirio vinieron y nos sacaron de nuestra casa por la fuerza. No pudimos conseguir nada más que la ropa que llevábamos puesta. Ahora lo necesitamos todo. Queremos volver a nuestra casa", contó.
Ehmed Silêman, un refugiado de Serêkaniyê, que tomó las armas para proteger su tierra y declaró que su familia vive en una escuela en Hesekê, fue hasta al pueblo de Til Nisri para encontrar una casa. Ehmed Silêman dijo que su casa fue atacada por aviones de guerra: "Nuestra casa, nuestra propiedad, ha sido saqueada."