Tras los ataques aéreos israelíes contra Irán el 13 de junio, el bombardeo mutuo continúa sin cesar.

Israel ha llevado a cabo ataques aéreos contra instalaciones de fabricación de misiles y plataformas de lanzamiento en la capital, Teherán.

Por su parte, Irán también ha lanzado numerosos misiles contra Israel. Según datos publicados por el servicio israelí de ayuda de emergencia, la Estrella Roja de David, durante la noche, los misiles impactaron en zonas residenciales, instalaciones energéticas y edificios públicos en muchas regiones, especialmente en Haifa y Tel Aviv.

Misiles balísticos lanzados desde Irán impactaron en la planta energética de la ciudad de Haifa. Tras el ataque, se produjeron explosiones en la zona donde se ubican instalaciones eléctricas, petroleras e industriales.

Según un comunicado de la Agencia Nacional de Servicios de Emergencia de Israel (Magen David Adom/MDA), 3 personas murieron y 74 resultaron heridas.

La embajada de Estados Unidos en Tel Aviv también resultó dañada en el último ataque de Irán contra Israel.

La agencia de noticias semioficial iraní Fars informó que las fuerzas del régimen ejecutaron a un hombre declarado culpable de "espiar" para el Mossad, la agencia de inteligencia israelí.

El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, declaró en su canal de Telegram: "El fanfarrón dictador de Teherán se ha convertido en un asesino cobarde y está disparando deliberadamente contra el frente interno de Israel para disuadirlo de continuar la ofensiva que está paralizando su capacidad. Los residentes de Teherán pagarán el precio por esto, y muy pronto".

El presidente iraní, Pezeshkian, afirmó que no buscan armas nucleares, pero que nunca renunciarán a la energía nuclear. Masoud Pezeshkian declaró: "Los ataques de Israel contra países musulmanes son un intento sistemático de opresión y dominación. Irán no cederá ante estas amenazas. Nunca hemos buscado el dominio regional. Israel es el bando que ataca a los pueblos musulmanes uno por uno e intenta imponerles sus propias imposiciones. Estados Unidos está violando claramente el derecho internacional al hacer la vista gorda ante estos ataques".

No buscamos armas nucleares. Sin embargo, nadie debe esperar que abandonemos la energía nuclear. Esperamos calma y solidaridad de nuestro pueblo durante este período. No nos doblegaremos ante la agresión israelí”.

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