Denuncian que el embargo del régimen sirio se cobra vidas

El gobierno sirio ha bloqueado por completo el suministro de combustible, los recursos médicos y alimentos a Shehba, Sheikh Maqsoud y Ashrafiyah durante tres meses. Las escuelas están suspendidas y todos los servicios públicos están restringidos.

La región de Shehba, que alberga a las y los desplazados de Afrin, está bajo el embargo del régimen sirio así como ataques del ejército turco y sus mercenarios. Los barrios Sheikh Maqsoud y Ashrafiyah de Alepo también están bajo embargo.

El co-presidente del cantón de Afrin, Mihemed Neso, y la miembro de coordinación de Kongra Star Aleppo, Roşîn Musa, hablaron con ANF sobre la última situación en la región de Shehba, los barrios de Sheikh Maqsoud y Ashrafiyah bajo embargo.

La región de Shehba tiene una población de más de 200 mil y alberga cinco campos de refugiados. Dos mil familias viven en los campamentos de Afrin, Shehba, Veger, Serdem y Berxwedan, donde las condiciones de vida se han vuelto más difíciles con la llegada del invierno.

15 mil estudiantes privados de educación

La región de Shehba se enfrenta actualmente a problemas de calefacción y cortes de energía debido a la falta de combustible. 70 escuelas en la región han sido suspendidas. 15 mil estudiantes no pueden recibir educación, mientras que 950 docentes no pueden continuar con su profesión.

Servicios de salud restringidos

Dos hospitales en los distritos de Fafin y Til Rifet tienen servicios de salud restringidos. Debido a la escasez de combustible y suministros médicos, se ha interrumpido el tratamiento de personas con enfermedades graves a pesar de sus condiciones potencialmente mortales.

Dos panaderías dejaron de funcionar

Dos de las nueve panaderías de la región han detenido recientemente sus operaciones. Hay una cantidad limitada de harina en otras siete panaderías que hornean pan para la gente de la región. Teniendo en cuenta la suspensión del suministro de combustible y harina a la región, es muy probable que cierren siete negocios.

Rusia hace a vista gorda

El co-presidente del consejo del cantón de Afrin, Mihemed Neso, señaló que la gente de Shehba, que ha estado viviendo bajo el embargo del régimen sirio y los ataques del estado turco durante más de cinco años, se ha visto afectada física y mentalmente. Y agregó: “Continúan los ataques diarios del estado turco contra la región. Es un plan diseñado por el estado turco y el gobierno sirio. Rusia coopera con ambas partes, haciendo la vista gorda ante los intereses de los pueblos de la región”.

No se puede suministrar alimentos a los hospitales

Neso comentó que las personas se han enfrentado a condiciones de vida difíciles desde el día en que emigraron a la región de Shehba: “El problema más importante en este momento es que no se pueden suministrar medicamentos a nuestros hospitales. Se acabaron por completo los medicamentos en nuestro centro médico. Los hospitales ya no pueden funcionar para atender a los pacientes. No hay combustible ni medicamentos. Los dispositivos de respiración no funcionan sin electricidad. Cada medicamento necesita una tasa de calor diferente para estar protegido. Es imposible satisfacer las necesidades de la vida sin combustible. Estamos en la temporada de invierno. Los ancianos y los niños se han enfermado. Los hospitales no pueden manejar el tratamiento de los pacientes, y éstos no pueden ser transportados a los hospitales debido a la detención de vehículos en los puntos de control. Los médicos están desesperados debido a las condiciones de salud".

Desplazamiento forzado

Al señalar que 15.000 estudiantes se han visto privados de educación, Neso continuó: “Dado que la mayoría de los estudiantes viven en aldeas, se necesita combustible para los autobuses escolares y el sistema de calefacción de las escuelas. La región se enfrenta a una gran amenaza. El gobierno sirio ha puesto en marcha la política de desplazamiento forzado. Esta política se basa en una alianza entre el estado turco y el gobierno sirio. Mientras el estado turco busca destruir la región militarmente, el gobierno sirio intimida a la gente con hambre. Por lo tanto, la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria se enfrenta a un golpe de estado que suspende sus operaciones”.

Ambos barrios están bajo embargo

Más de 250 mil personas residen en los barrios de Sheikh Maqsoud y Ashrafiyah de Alepo. Los barrios que tienen ocho panaderías que atienden a la población local han reducido el número a cuatro por falta de combustible y harina. Se puede proporcionar electricidad a dos barrios por solo tres horas al día. Las instituciones de educación y formación, que atienden a más de 5 mil estudiantes, también han sido suspendidas por falta de combustible. El Hospital Martyr Xalid Fajr ha restringido sus servicios debido a la escasez de combustible y suministros médicos.

Un niño murió

En el barrio de Sheikh Maqsoud, Wisam Sîdo, de cuatro años, murió de frío el 2 de enero debido a la falta de combustible. La familia de Sîdo, originaria de la aldea Qeretebê de Shera, emigró a Sheikh Maqsoud después de la invasión de Afrin.

Además, un bebé de 17 días llamado Hisên Ebdullah Kîbar murió congelado. Fuentes del hospital revelaron que la muerte se produjo por una neumonía a causa del frío. Lo mismos ocurrió con una niña de 4 años llamada Wisa Sîdo, quien murió congelada.

Roşîn Musa, miembro de la coordinación de Kongra Star Aleppo, señaló que el gobierno sirio impidió el suministro de harina, leche infantil, combustible, gas y alimentos a los barrios de Sheikh Maqsoud y Ashrafiyah. Musa denunció: “Este es un embargo de Alepo a Shehba. El gobierno sirio ni siquiera permite el suministro de leche infantil en la región”.

El régimen sirio ayuda a los ataques turcos

Roşîn Musa continuó: “El gobierno sirio utiliza varios métodos para crear el caos, destruir la seguridad y la vida común entre los sirios a través de las armas, el hambre y el embargo. El gobierno de Damasco allana el camino para los ataques de invasión del estado turco. Las organizaciones humanitarias internacionales también hacen la vista gorda ante la situación actual. Las fuerzas internacionales deberían imponer sanciones a estos países para que los pueblos de Siria no se enfrenten a un desastre humanitario”.