El KDP mantiene cerrado el paso fronterizo de Sêmalka entre el Kurdistán del Sur y Rojava. El vicepresidente del Consejo Ejecutivo de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES), Hesen Koçer, considera que este cierre es una decisión política que va en contra de los valores humanitarios. La dirección política de Hewlêr justificó la medida con la vigilia permanente en Sêmalka, llevada a cabo por las familias de los mártires en el paso fronterizo de Sêmalka-Pêşxabûr desde principios de octubre. Las familias exigen la entrega de los restos de los guerrilleros que murieron en una emboscada de las fuerzas especiales del KDP el pasado agosto.

Según ha explicado Koçer a ANF, el KDP no ha respondido a las demandas de las familias: “Los cadáveres están en manos del KDP y no se entregan a sus familiares. El pueblo protesta contra esto. El comportamiento del KDP es inaceptable y corresponde a su actitud hacia la revolución en el noreste de Siria. No ve a la gente como personas que han hecho una revolución y reclaman sus derechos y libertades, sino como un enemigo. El KDP siempre ha utilizado a Sêmalka como herramienta de presión y chantaje contra la población de Rojava. Con ello quiere quebrar la voluntad del pueblo. Los pasos fronterizos no deben utilizarse con fines políticos. Se trata de una cuestión humanitaria. No es correcto utilizar las fronteras como herramienta de chantaje y amenaza”.

Hesen Koçer ha señalado que, al mismo tiempo que el KDP, el gobierno de Damasco cerró los pasos fronterizos entre la región autónoma del noreste de Siria y las zonas controladas por el régimen sirio: “El mismo día, el régimen cerró los pasos de Manbij y Tabqa. La población del Norte y el Este de Siria está atrapada y con ello lo que se busca es quebrar su voluntad. Ese es el objetivo del embargo. Sin embargo, debe quedar claro que no vamos a renunciar a nuestra revolución. Será más difícil en ciertas zonas, pero no romperán nuestra voluntad”.

Koçer ha añadido: “Pretenden aumentar la presión política con el cierre de las fronteras. Eso va en contra de los principios humanitarios. El KDP tiene que entregar los cuerpos a las familias. Eso es lo que pide la población. Las familias no fueron a Sêmalka por gusto. Cerrar la frontera no es correcto.

En los medios de comunicación afines al KDP se hace propaganda y circulan informes de que ya no hay alimentos en el mercado. Sin embargo, la razón de esto es el propio KDP”.

La vigilia en Sêmalka terminará en el momento en que los familiares reciban los cuerpos de sus hijos, ha agregado Koçer, quien ha continuado. “Para deleite del régimen de Ankara, el KDP está aplicando la política del Estado turco. La voluntad del pueblo del Norte y el Este de Siria no puede ser quebrantada de esta manera. Hago un llamamiento a la población para que no se crea esta propaganda. Nuestro pueblo debe ser consciente de los objetivos políticos subyacentes y protestar contra ellos”.