El pueblo de Serêkaniyê a Merkel: ¡Están cometiendo un crimen!

La gente de Serêkaniyê le dijo a la Canciller alemana Angela Merkel que su apoyo a la invasión del estado turco en Rojava / Noreste de Siria es "un crimen".

 

La Canciller alemana Angela Merkel dijo en su reciente visita a Turquía que su gobierno apoya a Turquía en las zonas invadidas en el noreste de Siria. Las declaraciones causaron controversia en muchos ámbitos.

El parlamento alemán, que recientemente ha redactado un informe sobre los compromisos de Merkel, también definió las regiones como "zonas ocupadas", en lugar de "zonas seguras".

En el informe preparado por los diputados de la Oficina Científica se especificaba que "las noticias procedentes de las zonas ocupadas por Turquía sobre la sicuración de la seguridad en esas zonas no permiten descartar la presencia de un peligro concreto para la vida".

En el informe que se refiere al artículo 49 del Convenio de Ginebra sobre la protección de los civiles en tiempo de guerra, se utilizaron expresiones como: "En términos de la ley de ocupación está prohibido transportar a las personas a otros lugares".

Mientras continúan los debates sobre los tanques Leopard alemanes utilizados durante los ataques de invasión del Estado turco y la matanza de cientos de civiles en los ataques, las críticas a los intentos de Alemania de legitimar la ocupación también siguen en el orden del día.

La reacción del pueblo de Serêkaniyê

La gente de Serêkaniyê que fue desplazada por la fuerza de sus hogares debido a los ataques de invasión del Estado turco criticó fuertemente a Merkel. Más de 350.000 civiles tuvieron que abandonar sus hogares.

Los ciudadanos kurdos y árabes de Serêkaniyê que se alojan en el campamento Waşokanî, que fue construido en el norte de Hesekê después de la ocupación, se dirigieron a Merkel preguntando si sabe "a quién está tratando de entregar estas tierras".

Una ciudadana árabe llamada Asiya Xalid, que abandonó su hogar debido a los ataques de invasión del Estado turco y de mercenarios yihadistas y que ahora tiene que vivir en el campamento Waşokanî en el norte de Hesekê, dice que nunca aceptarán la decisión de la ocupación.

Asiya Xalid añadió: "No aceptamos esto. ¿Cómo podemos dejar nuestro lugar?, y todo para ir a otro lugar. Que vengan, que nos miren, que miren el campamento, que miren a nuestros hijos. Queremos volver a nuestro hogar."

Hablan de justicia y de derechos humanos, pero...

Una mujer árabe llamada Şemse Mihemed Bekir dijo: "Estamos en el medio. Pero a los grandes estados no les importa. Hablan de derechos humanos, hablan de justicia, se abrazan y muestran amor cuando ven un gato en la calle. Pero cuando se trata de la gente, se olvidan de todo."

Un hombre llamado Mihemed Mûsa dijo: "Estamos en la calle en el frío del invierno, estamos en los campos. Nos gustaría estar en nuestra casa, pero ahora los mercenarios están sentados en mi casa. ¿Cómo puedo volver?"

"Trajeron mercenarios y los colocaron en nuestras casas"

Afirmando que el estado turco trajo muchos mercenarios yihadistas y sus familias y los colocó en Serêkaniyê, Şêxmûs Elî Tahir dijo: "Trajeron muchos mercenarios y los colocaron en nuestras casas. ¿Cómo podemos volver a casa?"

350.000 personas desplazadas

Xalid Xelo, oficial del campamento Waşokani,  dijo que después de los ataques de invasión del estado turco, más de 350.000 personas se vieron obligadas a emigrar de la región y se dispersaron por todas partes.

Declarando que aproximadamente 8.500 personas viven en el campamento Waşokanî, Xalid Xelo agregó: "350.000 personas han sido desplazadas. Algunas de ellas se han trasladado a escuelas de Rojava, otras a escuelas y otras se han llevado a casa".

Las declaraciones de Merkel son deplorables

Hablando de las declaraciones de Merkel, Xalid Xelo dijo: "Han ocupado nuestras casas, nuestras tierras. Ahora estamos en esta situación. Merkel aprueba esta ocupación y esto no es aceptable".

Xalid Xelo terminó sus comentarios haciendo una llamada: "Pedimos a todos que se opongan a la ocupación y a las declaraciones de Merkel. Lo que han hecho es un crimen. Apoyar la ocupación es ser socios del crimen."