La Administración Autónoma del norte y este de Siria está haciendo todo lo posible para prevenir o al menos limitar la propagación del coronavirus en la región. Se ha anunciado un toque de queda y se han establecido equipos de intervención de emergencia. Se puede contactar a estos equipos por teléfono. Después de que las personas que llaman han sido interrogadas sobre los síntomas, los equipos se dirigen inmediatamente a las personas sospechosas de haber sido afectadas por la corona.

Simav Ibrahim explica lo siguiente sobre el trabajo en el equipo: "Trabajo en una estación de salud en Qamishlo. Después de una llamada, nos informaron sobre el caso sospechoso de un niño de cuatro años. El niño tenía fiebre alta. Examinamos el niño y enviamos muestras a un laboratorio. El resultado del examen fue negativo".

La administración autónoma llama a las personas a desinfectar sus hogares. Pero todo falta en esta región aislada en gran parte. En particular, la interrupción del suministro de agua por parte de Turquía es un problema enorme en la lucha contra la pandemia.

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