El grupo proxy de Ankara, Fırqat al-Hamzat, secuestró a un hombre yazidí de 70 años llamado Hesen Kalo que reside en la aldea keferzita de Jindires hace 20 días.

Se informa que el grupo pidió un rescate de 5 mil dólares para liberar a Kalo y darle permiso para permanecer en su aldea.

Se informa además que el anciano, que anteriormente se había quedado en el cantón de Shehba, fue engañado por miembros de ENKS que se aliaron con el estado turco y lo enviaron a Afrin. El hombre de 70 años fue secuestrado por el grupo poco después de su llegada.

Desde principios de septiembre, se ha secuestrado a civiles casi a diario. Las organizaciones de derechos humanos no han documentado los más recientes, pero los informes de fuentes locales indican que los civiles secuestrados tienen más de 10 años.

Más de 100 personas fueron secuestradas en un mes

Se ha establecido un régimen terrorista y represivo en Afrin, que ha estado bajo ocupación turca desde marzo de 2018. Crímenes como secuestro, ejecución, tortura, saqueo y desplazamiento forzado se han convertido en una rutina diaria en la ciudad donde se cometen sistemáticamente crímenes de guerra.

Según la Organización de Derechos Humanos de Afrin, el estado turco secuestró al menos a 101 personas en Afrin entre el 29 de julio y el 23 de agosto. La organización informó que 17 de las personas secuestradas eran mujeres y tres de ellas niñas.

La organización afirmó que el estado turco y sus mercenarios exigen un rescate por las personas que secuestraron y que el objetivo es completar el cambio demográfico desplazando a la población local.