Dos personas que intentaron cruzar hacia Bakur desde Rojava, cerca de Dirbêsiyê, fueron capturadas y golpeadas duramente por el ejército turco. Se trata de un joven llamado Hammoud al-Jasim y una mujer cuyo nombre no ha sido revelado. El joven sufrió varias roturas de huesos debido a los golpes. Ambos fueron despojados de sus pertenencias y sus teléfonos fueron destruidos. Actualmente están siendo atendidos en el Hospital Şehîd-Xebat de Dirbêsiyê.

Una y otra vez se producen graves ataques del ejército turco en la frontera. El ejército turco no escatima en asesinatos y torturas. La frontera interior kurda fue ampliada por el Estado turco con un muro y equipada con puestos de vigilancia. La UE apoyó la ampliación asignando fondos de la ayuda a la adhesión de la UE para la mejora de las fronteras del sur y el este de Turquía.