En el período previo al endurecimiento de las sanciones contra Siria a través de la llamada Ley César de EEUU, se ha disparado la inflación en Siria. La Ley César significa un endurecimiento masivo de las sanciones contra el régimen sirio y hace imposible de facto la reconstrucción del país. Las sanciones no sólo se dirigen contra los responsables de la tortura y los oficiales del régimen, sino contra todos aquellos que, en cualquier forma, "apoyan" al gobierno de Damasco. Así pues, no sólo Irán y Rusia son objeto de las sanciones, sino también cualquier entidad que acepte órdenes para cualquier forma de reconstrucción.

En una declaración publicada el domingo, el "Movimiento para una Sociedad Democrática" (TEV-DEM) responsabilizó al gobierno sirio de las sanciones y dijo: "Las sanciones contra Siria y su pueblo, conocidas como la Ley César, pronto entrarán en vigor. La comunidad internacional no ha presentado hasta ahora una solución a la crisis siria. Por este motivo, la sociedad siria lleva años experimentando el dolor resultante de los ataques basados en el confesionalismo, la discriminación étnica y las ambiciones de ocupación. El régimen sirio está eludiendo el diálogo entre los sirios, cuando en realidad es su responsabilidad y un requisito previo para una solución. Por consiguiente, el régimen es responsable de exacerbar la crisis social y económica del país. A fin de mitigar los efectos de esta crisis, debe buscar una solución y alternativas".

TEV-DEM hizo un llamamiento al gobierno de Damasco para que entablara un diálogo con todos los sectores de la población y ejerciera presión sobre la comunidad internacional para evitar las sanciones. Según la declaración del TEV-DEM, las sanciones afectarán principalmente a la población: "Representan otro desastre en la crisis de Siria. La infraestructura económica del país se ha derrumbado de todas formas y las necesidades de la vida cotidiana sólo se están satisfaciendo con gran dificultad. Otra desintegración es el sacrificio de los pueblos de Siria en aras de los intereses de Estados como Turquía, que quiere ocupar el país".

TEV-DEM llamó al Acta César una guerra económica, que también tiene como objetivo obligar a los pueblos del norte y el este de Siria a rendirse. Hablando de una política altamente inmoral que busca llevar a la población al hambre, TEV-DEM continuó: "Las sanciones significarán un duro golpe a los mercados Como resultado, el suministro de alimentos y las necesidades médicas se deteriorarán. De esta manera la pandemia del Coronavirus también se extenderá en la sociedad. Todo esto demuestra que se está librando una guerra económica contra nosotros y nuestro libre albedrío".

La declaración señaló que no sólo el gobierno sirio sino también la comunidad internacional sería responsable de los efectos de las sanciones: "Como TEV-DEM, vemos a las Naciones Unidas que cierra los ojos ante las consecuencias, como responsables. Junto con esto, la coalición internacional liderada por EE.UU. contra la ISIS, Rusia y el gobierno sirio también son responsables. Apelamos a la comunidad internacional para que detenga las sanciones y cumpla con su responsabilidad ética".