Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), en colaboración con las Unidades de Protección de la Mujer (YPJ) y las Fuerzas de Seguridad Interna, lanzaron una operación militar y de seguridad conjunta el 20 de abril. La misma, dirigida a las afueras de la ciudad de Heseke, se basó en información de inteligencia recopilada por instituciones de seguridad sobre las actividades de las células durmientes del ISIS dentro de estas áreas. El objetivo era detener a los miembros de estas células, así como a posibles colaboradores sospechosos o personas consideradas amenazas a la seguridad pública.
El minucioso rastreo y búsqueda de los lugares designados dio como resultado la detención exitosa de 40 presuntos miembros de células durmientes del ISIS. Además, se incautó una importante cantidad de armas y municiones.
Durante los interrogatorios, seis terroristas admitieron estar relacionados con el ISIS. Sus confesiones publicadas por el Centro de Medios de las SDF revelaron lo siguiente:
Ahmad Fawaz al-Rahman, alias “Abu Othman al-Baraka”, de al-Hasakah, se unió al ISIS en 2021 mientras trabajaba en el Líbano. Más tarde regresó a al-Hasakah, a la que se refirió como “provincia de al-Baraka”, y participó en el “batallón al-Zubair bin al-Awam” dentro de la ciudad.
Ahmad Fawaz al-Rahman admitió sus actividades terroristas, incluida la recaudación de dinero o el llamado “zakat” de comerciantes en al-Hasakah mediante tácticas de intimidación y la amenaza de quemar tiendas y propiedades si no cumplían. Participar en ataques posteriores contra objetivos militares en la región, incluida una operación alineada con la directiva "mátalos dondequiera que los encuentres" emitida por el ISIS antes del nuevo año. Facilitar la transferencia de fondos en nombre del ISIS. Reveló que se recibió dinero de sus líderes en Turquía y se distribuyó a miembros en al-Hasakah y Raqqa. Además, los fondos recaudados por la fuerza de los comerciantes también se transfirieron a Turquía.
El segundo terrorista, Omar Muhammad al-Sayyid, es de la ciudad de al-Hasakah: “Cuatro meses antes de mi arresto, conocí a una persona llamada Ahmad al-Nadi, que sabía que yo tenía un automóvil. Me habló por teléfono y me dijo que venía desde la zona de “Ab al-Shawk” con una suma de dinero. Fui hacia él y encontré una bolsa con forma de cubo, pero no verifiqué si era dinero u otra cosa. Después de que me arrestaron, supe que estaba lleno de armas, minas y explosivos”.
El tercer terrorista, Muhammad Ahmad al-Ahmad, también residente del barrio de al-Salhiya en al-Hasakah, confesó los actos terroristas que cometió: “Yo trabajaba en una tienda de telefonía móvil y mi relación con Ahmad Fawaz era que solía trabajar conmigo, ya que somos del mismo clan, pero era un extremista religioso”.
“Tras la detención de Ahmad Fawaz, un miembro del ISIS de Qamishli habló conmigo y me pidió que escondiera una bomba y una pistola de 7 mm que estaban dentro de la tienda en un lugar seguro. Más tarde descubrí que Ahmad Fawaz había llevado a cabo asesinatos con esa pistola”, añadió.
El cuarto terrorista, Muhammad Amin Khalil al-Obeid, residente del barrio de al-Salhiya en la ciudad de Hasakah, trabajaba en Rohin Remittance and Exchange Company. En sus confesiones, mencionó su relación con Ahmad Fawaz, un aldeano conocido por su devota adhesión religiosa. Al-Obeid reveló que antes de su detención, Fawaz le había confiado la tarea de recibir varias transferencias de dinero desde el extranjero, por un total aproximado de cincuenta dólares cada una. Se ordenó que estos fondos fueran enviados a Qamishli, solicitud que él cumplió. Al-Obeid afirmó además que las remesas procedían del Líbano y Turquía.
El quinto terrorista, Muhammad Fawaz Rahman, es residente del barrio de al-Salhiya en la ciudad de al-Hasakah y hermano menor de Ahmad Fawaz. Relató: “Mi hermano Ahmad llegó a Daraa para luchar con el ISIS contra las fuerzas del régimen sirio, pero permaneció dos meses en la capital, Damasco, durante los cuales participó en un curso de entrenamiento, luego regresó a al-Hasakah y lo hicimos. No sabía que se había unido al ISIS, pero se mantuvo religiosamente estricto”.
El sexto terrorista, Yusuf Fawaz Rahman, es residente del barrio de al-Salhiya en la ciudad de al-Hasakah. Informó: “Mi hermano Ahmad fue a Daraa para luchar con el ISIS contra las fuerzas del régimen sirio. Fue arrestado por el régimen sirio, pero liberado poco después. No sabíamos que se había unido”.
“Las confesiones de esos terroristas enfatizan una vez más la necesidad de que todas las partes involucradas en la lucha contra el terrorismo cumplan con sus responsabilidades y carguen con el peso de esta lucha que nuestras fuerzas han estado librando durante años, después de que el terrorismo ha demostrado que no tiene fronteras y apunta a la paz y la seguridad internacionales a escala global”, declararon las SDF.