Continúa la campaña genocida del Estado turco que pretende invadir el noreste de Siria en violación del derecho internacional -pero también disfrutando del silencio internacional-, desde octubre de 2019.
Las fuerzas del ejército turco y los mercenarios aliados han emprendido el domingo un ataque contra los pueblos de la ciudad siria de Ain Issa.
La agresión se dirigió a los pueblos de Hoshan, Abu Siray y Xalidiya, así como a la estación de carretera de Saqir, donde el bombardeo provocó un incendio.
Ayer temprano, las fuerzas de ocupación llevaron a cabo un ataque de artillería contra un camión en movimiento en la carretera internacional M4. El camión se dirigía de Ain Issa a la ciudad de Chalabi. El conductor, identificado como Usama al-Asaf de 31 años, resultó herido por el bombardeo. Fue trasladado al hospital por los residentes locales.
Ain Issa ocupa una posición estratégica clave
Ain Issa está situada a unos 45 kilómetros al sur de la ciudad de Girê Spî (Tal Abyad), que está ocupada desde octubre pasado por Turquía y el ejército de yihadistas a su servicio, el autodenominado Ejército Nacional Sirio (ENS), en la estratégica carretera M4. Debido a su relativa proximidad a la ciudad de Raqqa y, por consiguiente, a la puerta de Deir ez-Zor, Ain Issa ocupa una posición estratégica clave en los planes de ocupación de Turquía. Allí se producen regularmente ataques de artillería y de armas pesadas contra zonas habitadas y asentamientos. Se quiere despoblar la ciudad para anexarla a la zona de ocupación ilegal.
