El ejército turco y sus tropas mercenarias yihadistas han recurrido una vez más a incendiar campos de cereales en la región autónoma del norte y este de Siria mediante bombardeos selectivos, destruyendo así las cosechas. El Estado turco ha estado utilizando este método sistemáticamente desde la ocupación de Afrin en marzo de 2018 y la ocupación de Serêkaniyê (Ras al-Ain) y Girê Spî (Tal Abyad) en octubre de 2019 para matar de hambre y expulsar a la población.

Decenas de hectáreas de campos cultivados alrededor de Ain Issa fueron incendiadas hoy tras ser bombardeadas con artillería pesada. Debido a los continuos ataques, los bomberos no pueden extinguir los incendios. En la ciudad de Zirgan (Abu Rasen), los campos son bombardeados desde hace dos días desde una base mercenaria en la zona de ocupación turca y el incendio tampoco puede extinguirse aquí.

Los campos de cereales han estado ardiendo en el cantón Afrin-Shehba desde principios de semana. El jueves, tropas mercenarias de la cercana aldea de Basilê incendiaron campos en las cercanías de las aldeas de Aqîbê y Bênê. Las aldeas están situadas en el distrito de Sherawa, que no está totalmente ocupado. En Basilê, los yihadistas se han instalado en las casas de la población desplazada.