Más civiles han sido secuestrados en la ciudad de Afrin, en el norte de Siria. La ciudad fue ocupada por el ejército turco y mercenarios aliados durante más de tres años.

Según informes desde el terreno, la “policía militar”, mercenarios afiliados al estado turco, ha secuestrado a cuatro civiles, incluidas dos mujeres, del barrio de Ashrafiyah en Afrin.

Los personas secuestradas han sido identificados como Rojîn Enyat de la aldea Xalta del distrito de Jindires, Melek de Jindires, Hozan Eziz y Ebû Mûsa de la aldea Korika del distrito de Mabata.

No se dispuso de información de inmediato sobre las secuelas de los civilesy las civiles secuestradas.

Se ha establecido un régimen terrorista en Afrin, que ha estado bajo ocupación turca desde marzo de 2018. Crímenes como el secuestro, la ejecución, la tortura, el saqueo y el desplazamiento forzado se han convertido en una rutina diaria en la ciudad.

Según el portavoz de la Organización de Derechos Humanos de Afrin, İbrahim Şêxo, al menos treinta y siete personas fueron secuestradas en julio. Şêxo afirmó que la estructura demográfica en Afrin continúa cambiando, y agregó que el mes pasado se confiscaron veintiuna casas y lugares de trabajo por diversas razones. Şêxo también señaló que las personas que se hacen cargo de las tierras de sus familiares no pueden arar. Además, se han confiscado productos agrícolas y olivos en casi una treintena de aldeas.