Cientos de personas salieron a la calle en el distrito de Dirbesiyê, en el cantón de Qamishlo, para condenar las amenazas y los ataques del Estado turco invasor contra la región y exigir el cierre del espacio aéreo a los aviones turcos.

La marcha se convirtió en una concentración en la plaza del Mártir Xemgîn, donde se guardó un minuto de silencio. A continuación, el co-presidente del Consejo de Distrito de Dirbesiyê, Rustem Bekir, señaló que el Estado turco invasor quiere perturbar la seguridad de la región con estos ataques y amenazas, y asustar a la gente obligándola a emigrar. Bekir añadió: “El objetivo de estos ataques es destruir los logros del pueblo de la región, especialmente la ciudad de resistencia de Kobanê, que marcó el inicio de la derrota del ISIS que recibió el apoyo de Turquía”.

Bekir condenó el silencio de EE.UU. y Rusia sobre los ataques del Estado turco y exigió el cierre del espacio aéreo a los aviones turcos. También añadió que el pueblo del Norte y el Este de Siria resistirá los ataques y que los mártires protegerán sus logros.

Los habitantes de Girkê Legê también organizaron una marcha para condenar los ataques del Estado turco invasor.

En su intervención, la miembro de Kongreya Star Narîşan Berekat señaló que el Estado turco invasor continúa con sus violaciones de los derechos en la región: “Con estos ataques, Turquía quiere destruir la idea de una nación democrática y de la coexistencia, sembrando la lucha y el miedo entre la gente. Pero nuestra voluntad es cada vez más fuerte, lucharemos por nuestros derechos hasta que los planes del Estado turco queden en nada”.