Rescates y extorsiones en Afrin

Las prácticas inhumanas de las fuerzas turcas y sus milicias aliadas se incrementan en Afrin, especialmente durante los últimos meses.

La gente de Afrin se enfrenta diariamente a los horrores de la guerra. Además de los bombardeos contra sus poblaciones por el ejército turco y las milicias yihadistas, los civiles son secuestrados por estos segundos y extorsionados todos los días.

Justo ayer, la milicia pro-turca Jabhat al-Hamza secuestró a Fuad Ali, de la población de Serqiya, y pidió un rescate de 50 millones de liras sirias a sus familiares para liberarlo. Ni siquiera es la primera vez que Ali es secuestrado: previamente pidieron por él un rescate de 25 millones de liras sirias.

Ayer también secuestraron a tres personas en la población de Şêxbilê, en el distrito de Rajo. Se trata de Mihemed Ehmed, de 50 años de edad, Şukri Ehmed, de 75, y otra persona de 32.

Las fuerzas de ocupación también utilizan la Fiesta del Sacrificio para extorsionar. Por ejemplo, en las poblaciones de Kızılbash y Bêlê en el distrito de Bilbile, las milicias han extorsionado 200 dólares per cápita.

Las prácticas inhumanas de las fuerzas turcas y sus milicias aliadas se han incrementan en Afrin, especialmente durante los últimos meses. Bombardeos, secuestros, torturas y detenciones son algunas de las acciones que las fuerzas de ocupación llevan a cabo a diario. Desde principios de julio, varios cientos de personas han sido secuestradas. Tan solo en los últimos 20 días de julio, más de 300.

Los ataques del Estado de Turquía y sus aliados mercenarios contra la ciudad de Afrin y el conjunto de la región comenzaron el 20 de enero de 2018, completándose la invasión el 18 de marzo de ese mismo año.

Desde la invasión, los crímenes de guerra han sido cometidos sistemáticamente en la región. La estructura demográfica está siendo modificada, además de llevarse a cabo delitos de incautación de los bienes de los civiles, secuestros a cambio de rescates, torturas y ejecuciones.