El debate en la esfera pública turca continúa tras el histórico llamamiento realizado por Abdullah Öcalan el 27 de febrero. Mientras la opinión pública sigue de cerca la declaración de Öcalan y los acontecimientos posteriores, se están haciendo evaluaciones sobre cómo se desarrollará este nuevo proceso.

El proceso iniciado por el llamamiento de Öcalan al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y al Estado se define como el comienzo de una nueva era en la lucha por la libertad kurda, que dura más de 50 años. Desde ANF hemos hablado con Sinan Çiftyürek, diputado del Partido por la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (Partido DEM) y líder del Partido Comunista del Kurdistán (KKP), sobre los últimos acontecimientos.

La responsabilidad ahora recae en el Estado.

Sinan Çiftyürek, al afirmar que la lucha de liberación nacional del pueblo kurdo, que dura casi 200 años, exige ahora una solución, ha expresado que valoraba el llamamiento de Öcalan y el posterior anuncio del PKK de un alto el fuego. Continuado: “Consideramos que el llamamiento de Öcalan es significativo. Ha transmitido mensajes importantes sobre la cuestión kurda, que tiene raíces históricas y profundas en la región. El llamamiento de Öcalan al PKK para que deponga las armas y la rápida respuesta del Comité Ejecutivo del PKK, declarando: ‘Como PKK, estamos de acuerdo con el contenido de este llamamiento y declaramos que cumpliremos sus requisitos y lo implementaremos por nuestra parte. Sin embargo, también hacemos hincapié en que para tener éxito, es necesario que exista un marco político y jurídico democrático’, ha sentado las bases para un nuevo proceso en Turquía y el Kurdistán Norte. Este desarrollo ha allanado el camino para que la política civil aborde la cuestión kurda por medios democráticos y pacíficos.

Además, es innegable que la lucha del pueblo kurdo por la liberación nacional, que se extiende durante casi 200 años, ahora exige una solución. En esta larga lucha, especialmente en los últimos 40 años, el alto precio pagado por nuestro pueblo, la pérdida significativa de vidas provocada por la guerra para todos los pueblos y los efectos devastadores sobre las economías de Anatolia y el Kurdistán han exigido desde hace mucho tiempo la solución de la cuestión kurda.

Con su llamamiento, Öcalan ha desvelado este problema no resuelto y ha hecho recaer la responsabilidad de encontrar una solución en el Estado. Sí, la responsabilidad ahora recae en el Estado. Por eso, Öcalan ha hecho un llamamiento no sólo al PKK, sino también al Estado y a la alianza del pueblo”.

El Estado y la alianza del pueblo deben llevar rápidamente esta cuestión a la Gran Asamblea Nacional Turca.

Çiftyürek ha destacado la urgencia de que el Estado turco actúe con rapidez y allane el camino para una solución: “El presidente turco afirmó: ‘El Estado debe tomar medidas inmediatas para resolver la cuestión kurda’. La excusa de que ‘no puedo actuar hasta que se silencien las armas’ ya no es válida. El Estado y la alianza del pueblo deben llevar rápidamente esta cuestión a la Gran Asamblea Nacional Turca, garantizar un debate completo de la cuestión kurda y del Kurdistán en todas sus dimensiones y abrir el camino hacia una solución. No recurran, bajo ninguna circunstancia, a la propaganda del tipo ‘Miren cómo los aplastamos, cómo no les dejamos otra opción que rendirse’. No permitan declaraciones provocadoras de esta naturaleza.

Porque, con el llamamiento de Öcalan, la cuestión kurda y del Kurdistán se presenta ante ustedes de manera más clara y directa que nunca. La cuestión kurda, ya sea que su solución adopte la forma de autonomía, gobierno autónomo, federación u otro modelo, consiste fundamentalmente en que el pueblo kurdo alcance un estatus que garantice su derecho a la autogestión”.

Ante todo, ¡deben estar preparados!

Çiftyürek ha enfatizado que el pueblo turco debe prepararse para la paz, agregando: “Ante todo, ¡deben estar preparados! Además, la clase obrera y los trabajadores de Turquía han sufrido enormes pérdidas en esta guerra en curso. Debido a la carga económica del conflicto, han soportado una alta inflación, constantes aumentos de precios y una disminución del poder adquisitivo, experimentando pobreza y hambre, que continúan hasta el día de hoy. Si el problema y el proceso se explican correctamente, y si los medios de comunicación alineados con el Estado y la Alianza Popular transmiten responsablemente el asunto a la sociedad con precisión, creemos que el pueblo de Turquía apoyará un proceso de resolución pacífica y democrática”.

El pueblo kurdo no sólo ha deseado, sino que ha luchado activamente por una solución pacífica de la cuestión del Kurdistán desde el principio.

Çiftyürek ha afirmado que el pueblo kurdo, a diferencia de la población turca, está dispuesto a participar en este proceso desde hace mucho tiempo, concluyendo: “El pueblo kurdo, al igual que las madres que han sufrido el dolor de perder a sus hijos e hijas, está dispuesto a participar en este proceso desde hace mucho tiempo. El pueblo kurdo no sólo ha deseado, sino que ha luchado activamente por una solución pacífica de la cuestión del Kurdistán desde el principio. Si se abren los canales para la lucha civil, revolucionaria y democrática, es decir, si el proceso se desarrolla mediante pasos democráticos y legales, nuestro pueblo estará dispuesto a avanzar en su lucha por la libertad nacional y la democracia con mayor fuerza y determinación para lograr resultados”.

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