Desde el 8 de diciembre, la presa de Tishrin y el puente de Qereqozax han sido objeto de intensos ataques por parte del ejército turco y sus aliados del autodenominado Ejército Nacional Sirio (ENS), una fuerza mercenaria a sueldo de Turquía. Estos ataques representan una escalada en los esfuerzos más amplios del Estado turco por invadir los territorios gobernados por la Administración Autónoma Democrática del Norte y Este de Siria (AADNES), tras los enfrentamientos iniciados por HTS (Hayat Tahrir al-Sham) y sus aliados en Alepo el 27 de noviembre de 2023.

Desde ANF hemos hablado con el periodista Demhat Tolhildan sobre estos ataques y la resistencia a los mismos.

¿Cómo afecta el deseo de Turquía de controlar la presa de Tishrin y el puente de Qereqozax a sus objetivos estratégicos en Kobanê y sus alrededores?

La presa de Tishrin es fundamental para el suministro de agua y electricidad de la región, mientras que el puente de Qereqozax es un punto estratégico en la autopista M4, porque sirve de ruta comercial vital. El control de estos lugares otorgaría a Turquía el dominio de las zonas al este y al oeste del Éufrates. Con este objetivo en mente, Turquía planea ampliar sus ataques contra Kobanê, Ayn Issa, Raqqa, Tabqa, Sheikhler y Sirin. Sin embargo, la resistencia en Tishrin y Qereqozax frustró estas ambiciones.

Tras esta resistencia, los planes turcos de ocupación de Kobanê se detuvieron de hecho. Turquía se había propuesto asegurar ambos lados del Éufrates y, en última instancia, ocupar la totalidad del norte y el este de Siria. Si Tishrin y Qereqozax hubieran caído, zonas como Derik, Hasakah y Qamishlo se habrían enfrentado a graves amenazas. La resistencia llevada a cabo en estos dos puntos críticos salvaguardó el norte y el este de Siria y anuló las expectativas de Turquía.

¿Participan directamente las fuerzas turcas en el conflicto?

Soldados, aviones de reconocimiento y otras unidades militares turcas han participado activamente en el conflicto desde su inicio. El equipo militar, los tanques, los vehículos blindados y los vehículos de transporte de personal utilizados en los ataques están enteramente bajo mando turco. A pesar de ello, las milicias respaldadas por Turquía no lograron avanzar y fueron repelidas en ambos puntos críticos. Recientemente, los aviones de guerra turcos intensificaron sus bombardeos, intensificando su implicación en el conflicto.

¿Se están extendiendo los ataques más allá de Tishrin y Qereqozax, especialmente en el eje de Ayn Issa y Tel Tamir?

Se están produciendo ataques en múltiples regiones, desde Kobanê hasta Derik, con vuelos de reconocimiento y armamento pesado. Las milicias respaldadas por Turquía también intentaron incursiones en zonas rurales de Ayn Issa, Girê Spî y Serêkaniyê, pero fueron repelidas. Estos ataques no son nuevos; durante más de dos años, Turquía ha atacado las infraestructuras del norte y el este de Siria con ataques incesantes destinados a minar la moral, la voluntad y la situación psicológica de la población.

Aunque los enfrentamientos se concentran en Tishrin y Qereqozax, el objetivo más amplio de Turquía y sus apoderados yihadistas es desmantelar la AADNES. El modelo democrático establecido por la AADNES supone una importante amenaza para las ambiciones turcas. Turquía trata de imponer un sistema que sirva a sus intereses incrementando sus ataques contra la AADNES, teniendo como objetivo no sólo el norte y el este de Siria, sino toda la región.

¿Qué impacto tiene la resistencia de las SDF (Fuerzas Democráticas Sirias) a mayor escala?

Las SDF y sus componentes han demostrado una notable capacidad para hacer frente a estos ataques. Su resistencia ha resonado en toda Siria, inspirando esperanza y reafirmando que la sumisión a las fuerzas de ocupación no es inevitable. Organizándose y resistiendo, las SDF han demostrado que las sociedades pueden alcanzar la victoria.

Los grupos minoritarios de Siria, como alauitas, drusos y cristianos, consideran la resistencia de las SDF una fuente de moral. Muchas de estas comunidades desean alinearse con la AADNES, ya que ninguna otra fuerza en Siria ofrece un modelo comparable de coexistencia. El sistema establecido en el norte y el este de Siria ofrece un marco para la vida en común, y muchas personas participan activamente en la resistencia, lo que refuerza la voluntad colectiva de lucha.

¿Cuál es la situación de la población en Manbij y Shehba, donde las milicias respaldadas por Turquía han tomado el control?

En Manbij y Shehba, gran parte de la población se vio obligada a huir a causa de la violencia. Los que se quedan se enfrentan a condiciones extremas bajo las milicias, como confiscación de bienes, saqueos, torturas y otras atrocidades. Estas prácticas ponen de manifiesto la grave situación de la población local y suscitan gran preocupación por el futuro de Siria. Turquía ha creado y dado poder a estas milicias para aterrorizar a la población local, erosionando cualquier esperanza de una resolución democrática o pacífica.

Las milicias están formadas principalmente por combatientes extranjeros de países como Uzbekistán, Tayikistán y Chechenia, reclutados por Turquía y desplegados como agentes de destrucción. Estos grupos no han traído más que devastación y asesinatos masivos a Siria, sin dejar espacio para la reconciliación o el progreso democrático.

¿Cuáles son las posibles implicaciones internacionales de los continuos ataques de Turquía, en particular los perpetrados contra la región del Éufrates?

Las atrocidades cometidas por las milicias respaldadas por Turquía son ampliamente reconocidas. También lo es la resistencia de las SDF. Por desgracia, la protesta internacional contra estos crímenes ha sido escasa. Hay que detener a estas milicias, o seguirán intensificando sus ataques, alentadas por la falta de rendición de cuentas.

Los esfuerzos de estos grupos por borrar el carácter diverso y plural de Siria y sustituirlo por una estructura monolítica y autoritaria suponen un grave peligro para el futuro del país. Si las potencias internacionales desean desarrollar relaciones significativas con Siria, deben apoyar al pueblo sirio contra estos ataques. La AADNES y las SDF ofrecen un modelo viable e integrador para el futuro de Siria, que merece el reconocimiento y el respaldo mundiales.