Acción de protesta por Aysel Tuğluk en Amed

Activistas del movimiento de mujeres kurdas TJA exigieron la liberación de Aysel Tuğluk con una pancarta colgada desde el puente Tigris en Amed. La abogada y política encarcelada no es liberada a pesar del avance de su enfermedad de demencia senil.

Activistas del Movimiento de Mujeres Libres (TJA) exigieron la liberación de Aysel Tuğluk con una pancarta lanzada desde un puente en Amed (tr. Diyarbakır). La política kurda, encarcelada desde hace casi seis años, padece demencia de Alzheimer crónica y progresiva, pero aún no sale en libertad. La TJA describe el trato del poder judicial turco al hombre de 57 años como "ley enemiga". En la persona de Tuğluk, se quiere castigar al movimiento kurdo, pero sobre todo a los partidarios de la ideología de liberación de la mujer, según TJA.

"Libertad para todos los presos enfermos" estaba escrito en la pancarta con la imagen de Tuğluk que se dejó caer desde el Puente Tigris el jueves. El paso elevado está ubicado en el antiguo barrio central de Sur y también es conocido como el "puente de los diez ojos" por sus diez arcos. Después de la caída, los activistas de TJA corearon varias consignas durante un tiempo, entre ellas "Aysel Tuğluk es nuestra dignidad" y "Viva la resistencia en las cárceles". Fueron apoyados por el diputado del HDP Feleknas Uca.

Aysel Tuğluk ha estado en la prisión de Kandıra en la provincia occidental turca de Kocaeli desde diciembre de 2016. La abogada, que representó a Abdullah Öcalan entre otros, ya ha sido sentenciada en varios juicios, mientras que otros juicios aún están pendientes. En febrero de 2020, el Tribunal de Apelación de Turquía confirmó la pena de prisión más alta de Tuğluk hasta la fecha, diez años de prisión. Fue declarada culpable de "dirigir una organización terrorista" debido a su función como copresidenta de la alianza de base "Congreso de la Sociedad Democrática" (DTK). En octubre de 2021, siguió una sentencia de veinte meses de prisión contra la exdiputada por supuesta propaganda terrorista en 2012 y 2013. En el llamado juicio de Kobanê en Ankara, se enfrenta a una cadena perpetua agravada.