Sisê Bingöl, una mujer kurda de 85 años, está en prisión a pesar de su avanzada edad. Sufre varias enfermedades graves. “Si voy a morir, moriré en la tierra de mi aldea”, ha comentado.

La Asociación de Derechos Humanos (IHD) ha lanzado una campaña para exigir la liberación de Sisê Bingöl.

Según las cifras de la IHD, existen en la actualidad 1,154 presos enfermos en las cárceles de Turquía y Kurdistán. De ellos, 402 están en situación grave.

Una de las personas críticamente enfermas es Sîsê Bingöl de 85 años, que está en la prisión de Mujeres Tarsus de Tipo T.

Bingöl sufre varios problemas de salud debido a su avanzad edad: problemas estomacales, diabetes, asma, presión alta, etc. No tiene fuerza para lidiar con las cosas ella sola y consigue sobrevivir gracias a la ayuda de otras presas.

En el informe publicado por el Hospital Estatal Mus, se informa que “debido a su salud no es correcto que esté en prisión”. Sin embargo, otro informe, en este caso del Instituto de Medicina Forense de Estambul (ATK) afirma que “su estancia en prisión no afecta ni pone en riesgo su vida”. Ese informe fue suficiente para evitar su puesta en libertad.

Derya Yildirim, Comisionada de Prisiones de la IHD en Amed,  ha dicho que debido a su frágil salud y su edad, Bingöl tiene que ser liberada inmediatamente.

Yildirim h añadido que apelarán al Tribunal Constitucional y emprenderán una campaña de recogida de firmas para denuciar la situación de esta mujer kurda y exigir su liberación inmediata.