El 15º informe anual sobre la pena de muerte elaborado por Derechos Humanos de Irán (IHRNGO) y ECPM (Juntos contra la Pena de Muerte) ofrece una evaluación y un análisis de las tendencias de la pena de muerte en 2022 en la República Islámica de Irán. Expone el número de ejecuciones en 2022, la tendencia en comparación con años anteriores, el marco legislativo y los procedimientos, los cargos, la distribución geográfica y un desglose mensual de las ejecuciones.
El informe revela el mayor número anual de ejecuciones desde 2015. Al menos 582 personas fueron ejecutadas en 2022, un aumento del 75% en comparación con 2021.
La tendencia continuó en 2023. Al menos 199 personas fueron ejecutadas en los cuatro primeros meses de 2023. 51 de los ejecutados eran kurdos y kurdas y 42 eran ciudadanos baluches. El régimen iraní no reveló la identidad de 31 personas ejecutadas.
En 2022, las autoridades iraníes demostraron lo crucial que es la pena de muerte para infundir miedo en la sociedad con el fin de aferrarse al poder. Semanas después de las protestas nacionales "Jin, Jiyan, Azadi", desencadenadas por el homicidio de Jina (Mahsa) Amini a manos del Estado el 16 de septiembre de 2022, cientos de manifestantes se enfrentaban a juicios amañados en los Tribunales Revolucionarios, muchos de ellos y de ellas con cargos punibles con la muerte.
El informe señala: "Dos manifestantes fueron ejecutados en diciembre de 2022. Las fuertes reacciones internacionales, el hecho de que parlamentarios se ofrecieran como ‘patrocinadores políticos’ para salvar a manifestantes condenados a muerte y las sanciones selectivas contra personas y entidades implicadas en la represión han elevado el coste político de ejecutar a manifestantes. En respuesta, las autoridades intensificaron la ejecución de presos por cargos no políticos".
Algunos puntos destacados del informe son los siguientes:
- Al menos 582 personas fueron ejecutadas en 2022, un aumento del 75% en comparación con las 333 de 2021.
- 71 ejecuciones (12 %) fueron anunciadas por fuentes oficiales, frente al 16,5 % en 2021 y una media del 33 % en 2018-2020.
- El 88 % de todas las ejecuciones incluidas en el informe de 2022 (511 en total) no fueron anunciadas por las autoridades.
- Al menos 288 ejecuciones (49% de todas las ejecuciones) fueron por cargos de asesinato, la cifra más alta en más de 15 años.
- Al menos 256 (44 %) fueron ejecutadas por cargos relacionados con drogas, frente a 126 (38 %) en 2021 y una media de 26 al año en 2018-2020.
- Solo 3 de las 256 ejecuciones relacionadas con drogas (1%) fueron anunciadas por fuentes oficiales.
- Al menos 23 personas fueron ejecutadas por cargos de violación.
- Al menos 15 personas, entre ellas 2 manifestantes, fueron ejecutadas por cargos relacionados con la seguridad (moharebeh y efsad-fil-arz).
- Dos personas, entre ellas un manifestante, fueron ahorcadas en espacios públicos.
- Entre los ejecutados había al menos 3 menores.
- Al menos 16 mujeres fueron ejecutadas.
- Al menos 273 ejecuciones en 2022 y más de 4.029 ejecuciones desde 2010 se han basado en condenas a muerte dictadas por los Tribunales Revolucionarios.
- Al menos 624 presos condenados a muerte por cargos de asesinato fueron perdonados por las familias de las víctimas en virtud de las leyes de qisas.