Madres de presos políticos detenidos en Estambul

La policía de Estambul ha detenido nuevamente a las madres de los presos en una vigilia. “Quien levanta la voz en Turquía va a la cárcel y no hay garantía de que salga con vida”, expresó la diputada del HDP Züleyha Gülüm.

La policía de Estambul disolvió una vez más una vigilia de familiares de presos y presas políticas frente al Palacio de Justicia de Çağlayan y detuvo a la fuerza a tres mujeres. La “Vigilia de Justicia” se realiza todos los jueves para exigir la liberación de quienes se encuentran gravemente enfermos y enfermas, aún encarcelados por no haberse arrepentido a pesar de haber cumplido sus condenas. La mayoría de los participantes son madres que luchan por la vida de sus hijos encarcelados. Nuevamente hoy, tres madres fueron atacadas por una enorme fuerza policial y respondieron con el eslogan kurdo "Bijî berxwedana zindana" ("Viva la resistencia en prisión").

Antes del ataque policial, una de las mujeres trató de explicar su preocupación al oficial a cargo: "Nuestros niños están enfermos y no los llevan al médico. Los someten a una cruel opresión todos los días". El oficial de policía respondió: "Por sus hijos, nuestros hijos están en la tumba".


La diputada del HDP Züleyha Gülüm, que acompaña la acción de protesta casi todos los jueves en solidaridad, protestó contra la acción y criticó la prohibición de reunión impuesta por las autoridades como arbitraria e ilegal: "¿De qué manera se amenaza la seguridad pública cuando cuatro madres hacen una declaración aquí? ¿Cómo se supone que esto crea un problema de salud? Mientras que aquí se permiten otras manifestaciones, ¿por qué estas madres son un problema? Obviamente, se supone que el público no debe saber sobre las condiciones en la prisión. Sin embargo, estos crímenes son bien conocidos. Se sabe que las personas son torturadas y llevadas al suicidio en prisión, que se coloca una hoja de afeitar frente a las narices de los presos para que se suiciden, que los enfermos no son tratados y se los deja morir. Incluso los pacientes con cáncer no son tratados".

Las prisiones se han convertido en un instrumento para silenciar a la sociedad en Turquía, dijo Züleyha Gülüm, y agregó: "Si levantas la voz, vas a prisión y no hay garantía de que salgas con vida".