En una declaración hecha pública para expresar su solidaridad con todos los presos políticos y su apoyo a todos los que luchan por su liberación, la campaña Peace in Kurdistan ha afirmado: "A los valientes hombres y mujeres de Irán y a los detenidos por sus convicciones políticas, les enviamos nuestros saludos de solidaridad.

Estamos con vosotros y vosotras y saludamos vuestras luchas, y exigimos justicia para todos y todas los detenidos políticos en Irán, en todo el Kurdistán y, de hecho, en los países de todo el mundo dondequiera que se detenga injustamente a personas por sus opiniones políticas".

La declaración continúa: "Los presos y las presas políticos se enfrentan a la agresión incesante y la hostilidad despiadada de los regímenes represivos; son objeto de atroces actos de tortura, intimidación, amenazas a sus familias, amenazas de desaparición y ejecución sumaria sin juicio.

Ante tales horrores inimaginables, el valor de los presos y las presas políticos para resistir es aún más inspirador y su lucha por la justicia, a pesar de lo que a veces pueden parecer probabilidades abrumadoras, es una inspiración para el creciente movimiento popular que, exigiendo un cambio en Irán, acaba dando lugar a una creciente oleada en todo el mundo

No olvidamos a ningún preso político. No importa cuánto tiempo lleven detenidos, cómo les hayan silenciado, prohibido el acceso incluso a los derechos más básicos que les corresponden como seres humanos y en virtud del derecho internacional; hay muchas personas que estamos con ustedes. Estamos orgullosos y orgullosas de prestar nuestro apoyo a esta acción de solidaridad internacional".

La declaración añade: "Los días de acción, la solidaridad internacional y las campañas persistentes son absolutamente vitales para garantizar que los nombres de los presos y las presas individuales permanezcan en el primer plano de nuestra conciencia. Es especialmente importante apoyar a los presos y a las presas que están recluidos en régimen de aislamiento, totalmente alejados de la vista pública y a los que se niega incluso el contacto con familiares y amigos.

El movimiento multitudinario por la justicia social saca fuerzas del reconocimiento de que es un régimen débil el que recurre a encerrar a sus ciudadanos y ciudadanas sin el debido proceso y de que tales regímenes viven con miedo y temor de su propio pueblo. También temen que se descubran sus crímenes y retrocedan ante la perspectiva de tener que rendir cuentas de sus actos.

Peace in Kurdistan se mantiene firme en su solidaridad ahora y hasta que todos los presos y presas políticos sean liberados".