Un nuevo informe publicado por Iran Human Rights muestra que la respuesta de la República Islámica a cualquier activismo en favor de los derechos humanos es la represión violenta, y que la situación de los defensores de los derechos humanos se ha deteriorado significativamente en comparación con el año pasado.
Muchos y muchas activistas han sido detenidos ilegalmente de forma “preventiva” en sus domicilios y en lugares distintos de las protestas. Activistas como Golrokh Irayi-Ebrahimi, Milad Fadayi, Saba Sherdoost y Majid Tavakoli, según el informe, que añade que “un número significativo de defensores también padecen enfermedades.
Arash Sadeghi fue detenido a pesar de padecer una rara forma de cáncer. El rapero Toomaj Salehi se enfrenta a cargos que conllevan la pena de muerte por sus canciones de protesta. También hay profesores que fueron detenidos o sufrieron represalias por negarse a entregar nombres de alumnos y estudiantes que protestaban o estaban en huelga, y una de ellas perdió la vida debido a un ataque al corazón por la presión”.
Los abogados y abogadas dispuestos a representar a los manifestantes y a otros defensores de los derechos humanos han sido especialmente perseguidos a un ritmo sin precedentes, y al menos 46 de ellos han sido objeto de detenciones o acciones judiciales.
Iran Human Rights hace un llamamiento a la sociedad civil “de todo el mundo” para que apoye a quienes luchan por sus derechos fundamentales “en circunstancias tan difíciles en Irán. Artistas, colegios de abogados, sindicatos de trabajadores, periodistas, activistas y otras personas pueden ayudar a salvar sus vidas siendo sus voces.
Hacemos un llamamiento a personalidades conocidas para que actúen de forma coordinada siguiendo cada una de ellas la situación de una de las personas enumeradas en este informe, y para que sean su voz en entrevistas y apariciones públicas.
Muchos de los defensores de los derechos humanos están entre rejas en condiciones peligrosas; la presión internacional y elevar el coste político de la represión, es la única forma de reducir la presión sobre ellos”.