La canciller alemana Angela Merkel (CDU), el presidente francés Emmanuel Macron y su homólogo turco Recep Tayyip Erdoğan han hablado hoy por videoconferencia sobre el conflicto sirio y la situación en las fronteras exteriores de la UE. En un principio, Merkel y Macron tenían previsto viajar a Estambul, pero la reunión se convirtió en una videoconferencia debido a la pandemia de coronavirus.
Turquía quiere renegociar el paquete de refugiados de 2016 con la Unión Europea. Hasta entonces, el gobierno turco mantiene la presión con la ayuda de las fronteras abiertas. Desde el punto de vista de Turquía, la UE no ha cumplido con sus obligaciones financieras en los últimos años. La UE ha asegurado a Turquía hasta seis mil millones de euros en 2016 para garantizar el alojamiento y la atención, especialmente a los refugiados sirios. Erdoğan, sin embargo, acusa a la UE de no haber pagado la suma prometida. La UE lo niega. Según la Comisión de la UE, hasta ahora se han adjudicado contractualmente 4.700 millones de euros y se han pagado unos 3.200 millones.
La semana pasada Erdoğan ya se había reunido con la Presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen y el Presidente del Consejo Europeo Charles Michel en Bruselas. La ocasión fue la decisión del Presidente turco de no seguir impidiendo la entrada de refugiados y migrantes en la Unión Europea. Erdoğan había declarado a finales de febrero que la frontera con la UE estaba abierta. Como resultado, miles de personas habían partido en dirección a Grecia. Allí las fuerzas griegas les impidieron cruzar la frontera utilizando gases lacrimógenos y cañones de agua. Según la ONU, unas 13.000 personas esperan en la frontera turco-griega. Los enfrentamientos entre la policía fronteriza y los refugiados ocurren casi a diario.
"Un nuevo acuerdo con el dictador Erdogan, que abusa de los refugiados como rehenes contra Europa y por lo tanto pone en riesgo sus vidas y su salud, sería el punto más bajo absoluto de la política europea de refugiados", dijo Ulla Jelpke, portavoz de política interna del grupo parlamentario DIE LINKE (Partido de la Izquierda Alemana), en la conferencia telefónica de hoy Erdoğan Merkel-Macron.
"En lugar de hacer más concesiones al gobernante megalómano, la inhumana política europea de aislamiento debe terminar de una vez por todas y los refugiados deben ser aceptados en Europa", exigió Jelpke y dijo: "La gente de la frontera ha sido atraída allí por el Estado turco bajo falsas promesas. Ahora es importante organizar la recepción inmediata de las personas atrapadas en la frontera por la policía turca y griega. Erdoğan ha mostrado una vez más: Turquía es todo menos un tercer país seguro."
Es simplemente "patético", dijo, cómo Alemania ha hecho campaña repetidamente a nivel europeo para "apaciguar al dictador".
"Los intereses económicos obviamente superan las guerras de agresión y las violaciones sistemáticas de los derechos humanos para el gobierno alemán. Así, el Gobierno Federal se hace cómplice del criminal de guerra Erdoğan y le ayuda a crear constantemente nuevas causas de huida", subrayó Jelpke.