Más de 300 internacioalistas se unieron a la acción, liderada por Tevgera Ciwanên Şoreşger (Movimiento de la Juventud Revolucionaria) en Gelsenkirchen, Alemania. 

Los intelectuales, doctores y estudiantes kurdos que participaron en la acción dieron mensajes de solidaridad con Rojava.

Se cantó una canción alemana para exigir la libertad del líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan y enviar un mensaje de solidaridad con Rojava.

Los activistas siguieron la pancarta con el eslogan "Libertad para el Kurdistán - Proteger Kobanê" y portaron banderas de las YPG. La policía alemana trató de confiscarlas, ya que en Alemania se han prohibido símbolos como estas banderas o las del PKK.

El movimiento juvenil kurdo reaccionó ante la actitud inaceptable de la policía e instó a "todos los jóvenes revolucionarios a luchar contra la criminalización".