Bêwar Ünver, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del campo de refugiados de Mártir Rûstem Cûdî, declaró que la resistencia de Makhmur tuvo éxito pero que el peligro sigue existiendo y llamó la atención sobre las presiones del Estado iraquí.
Bêwar Ünver, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Campo de Refugiados Martyr Rûstem Cûdî (Makhmur), habló con ANF sobre el intento del Estado iraquí de cercar Makhmur y la resistencia a los ataques.
Ünver afirmó que el ejército iraquí intentó rodear el campamento con vehículos blindados y militares el 20 de mayo, y añadió: "El ejército iraquí bloqueó el campamento con vehículos blindados y militares el 20 de mayo, junto con la policía. Al ver esto, la gente se puso delante de los vehículos blindados y defendió su voluntad frente al ejército iraquí haciendo uso de sus derechos democráticos. Día tras día, la resistencia crecía. Después de 30 años, el pueblo nunca aceptará que se construyan alambradas alrededor del campo, se rodee de torres y se excaven zanjas.
Nuestra resistencia hizo que el gobierno iraquí reconsiderara su decisión. Esta resistencia dio buenos resultados. La resistencia justa siempre conduce a la victoria. La resistencia trajo el éxito. La lucha y la voluntad del pueblo dieron resultados en las reuniones. El Estado iraquí había dicho anteriormente que sólo un grupo no quería estas torres, pero el 20 de mayo vieron la voluntad del pueblo. El pueblo tenía una voluntad muy fuerte".
"La resistencia de Maxmur demostró una vez más que la voluntad de este pueblo no puede ser quebrantada por la opresión y la crueldad. Todos, de 7 a 70 años, ocuparon su lugar en la resistencia. Esta situación conmocionó al Estado iraquí. La resistencia de Maxmur hizo retroceder al Estado iraquí e hizo reaccionar a la opinión pública kurda. Sin la resistencia, el ejército iraquí habría rodeado el campo en cuestión de horas", dijo Ünver.
La ONU está bajo la influencia del Estado turco
Criticando la actitud de la ONU ante la opresión y los asedios, Ünver dijo: "La ONU nos reconoció como refugiados políticos desde 1994 hasta 2014, cuando se produjeron los ataques del ISIS. Pero tras los ataques del ISIS, se marcharon en lugar de proteger el campamento. Desde entonces, no han protestado por los ataques al campo, por las presiones y por el embargo del KDP. Se celebraron muchas conversaciones, pero la ONU prefirió guardar silencio. Dejaron sin respuesta los informes que enviamos desde el campamento. Es evidente que la ONU actúa bajo la influencia del Estado turco".
