El mártir Rêber Roboski luchó en los Zagros durante muchos años, infligiendo duros golpes al enemigo, especialmente en las numerosas acciones que llevó a cabo en Zap. El comandante Roboski estuvo en los túneles de guerra de Xeregol en 2017 y en Zap en 2022.

Antes de los nuevos ataques de invasión lanzados en abril de este año, dijo a ANF:

"Quiero afirmar que estoy preparado como guerrillero. En estos procesos, los ataques del enemigo son muy intensos, y la mayoría de ellos han sido frustrados por la guerrilla. Debo declarar que estoy preparado, como todos mis compañeros, para una guerra que pueda tener lugar. No permitiremos que el ejército turco invasor cumpla sus sueños de ocupar el Kurdistán. Sobre esta base, confío plenamente en mí mismo. No importa la forma en que el enemigo intente golpearnos, será en vano. No importa el estilo y el método que intenten utilizar contra nosotros, los rechazaremos firmemente con la experiencia que hemos adquirido de nuestra historia. Gracias a estas experiencias, me siento preparado para luchar hasta el final".