Internacionalista estadounidense: “La lucha contra el ISIS no es suficiente”

El internacionalista estadounidense de las YPG Sipan Van Spronson señala la necesidad de luchar no solo contra el ISIS, sino también contra el fascismo turco.

La Revolución de Rojava es un proceso revolucionario que abarca no sólo a los pueblos de Oriente Medio, sino a todos los pueblos del mundo. Internacionalistas de todo el mundo se han unido a la revolución. Uno de los afectados por la lucha de la Revolución de Rojava es el internacionalista estadounidense Sipan Van Spronson. Van Spronson, que llegó a Rojava hace 15 meses, ha hablado con ANF sobre su decisión de unirse a las YPG y su experiencia en Rojava.

Van Spronson dijo: “Vine porque creo en la ideología de este movimiento, creo en el establecimiento de una democracia sin Estado basada en la liberación de las mujeres, y creo en la autodefensa de los pueblos de Oriente Medio contra el ISIS y el fascismo turco.

Es difícil de describir el momento en que llegué por primera vez a Rojava. Había una sensación de libertad tan intensa al estar aquí con mis compañeros que sabía que estaban para luchar por las mismas cosas que yo... incluso dentro de la sociedad estaba claro que había un enfoque mucho más democrático y liberado de la vida, y es realmente maravilloso estar dentro de un sistema y un pueblo que decide vivir de esa manera”.

El internacionalista continuó: “Para mí, unirme a las YPG fue una experiencia maravillosa e inestimable. Fue una oportunidad para luchar por algo en lo que creo, en oposición a un modo de vida tan violento y represivo: este nacionalismo, este enfoque hiperreligioso, esta idea de una bandera, un pueblo, un Estado. Y poder participar en un movimiento que, en cambio, lucha por la liberación de las mujeres, por la creación de un pueblo autónomo y una forma de vida autónoma”.

Dirigiéndose al pueblo estadounidense, Van Spronson dijo: “Creo que si tuviera que decir algo al pueblo estadounidense, o incluso a todos los pueblos de Occidente, diría que se nos está acabando el tiempo. Se acabó el tiempo de la complacencia, si realmente nos importa la libertad, la liberación, la igualdad y la democracia, entonces ya no podemos confiar en el trabajo y la sangre de otros; debe hacerse con nuestras manos y nuestra propia sangre. Así que si queremos llamarnos revolucionarios, y fundamentalmente humanos, es el momento de salir ahí fuera, de trabajar, de hacer algo. No es necesario unirse a una fuerza militar, pero no podemos seguir siendo complacientes.

Otra cosa de la que me gustaría hablar es de la importancia del enfoque ecologista dentro de este movimiento. Especialmente como persona joven, pienso mucho en el cambio climático, en las horribles catástrofes que esto traerá y ya está empezando a traer a la gente de todo el mundo. Así que ese aspecto también es realmente importante para mí, luchar contra este consumo capitalista del medio ambiente, de la tierra que nos rodea”.

El internacionalista recordó que “la lucha contra el ISIS está en curso. A pesar de los informes del gobierno estadounidense que dicen que el ISIS ha sido derrotado, esto no es cierto. En primer lugar, gran parte del trabajo que se está haciendo es realizado por nuestras fuerzas, y el trabajo está lejos de terminar. Todavía tenemos células durmientes que están decapitando a civiles y cometiendo horribles actos de violencia, así que creo que lo que hay que entender es que si empezamos un trabajo, tenemos que terminarlo, y terminarlo en su totalidad. Y esto incluye también nuestro enfoque hacia el Estado turco, que no sólo ha apoyado activamente al ISIS en el pasado, sino que incluso ahora, dentro de los diversos grupos yihadistas que apoya en el norte de Siria, hay ex miembros del ISIS que simplemente buscan reiniciar su movimiento, y eso se puede ver dentro del Ejército Sirio Libre y muchos de los otros grupos que Turquía apoya. Quiero decir que lo que es importante entender es que esta es una lucha que está en curso, y que vamos a luchar hasta el final”.

Van Spronson agregó: “Creo que una de las cosas que hemos podido comprobar es una tendencia de los Estados Unidos a olvidar a sus aliados, por ejemplo en Afrin y Serekaniye, lugares donde el ejército estadounidense básicamente allanó el camino para la invasión turca. Y creo que desde una perspectiva internacional, y una perspectiva internacionalista, es importante entender que si nosotros, como pueblo estadounidense, queremos ver al pueblo kurdo y todo Oriente Medio libre, tenemos que venir y hacer algo al respecto. Porque está claro que nuestros estados seguirán trabajando sólo para sí mismos”.