Las HPG rinden homenaje al comandante guerrillero Reşîd Serdar

El guerrillero Reşîd Serdar murió hace cuatro años. Era comandante de zona de las HPG y cayó como mártir en encarnizados combates y posteriores ataques aéreos del ejército turco en su región natal de Van.

SEHID NAMIRIN

El Centro de Prensa de las Fuerzas de Defensa del Pueblo (HPG) ha publicado una necrológica del comandante guerrillero caído Reşîd Serdar. Según la información, Reşîd Serdar murió el 27 de mayo de 2020 en el curso de feroces combates y posteriores ataques aéreos del ejército turco en la zona Nordiz de VAN-Payizava.


Su muerte ha sido ahora confirmada. El HPG describió a Reşîd Serdar como un buscador de la verdad que encontró el sentido de su vida en el PKK. El HPG expresó sus condolencias a su hija Semira y a toda la familia, así como al pueblo del Kurdistán. El HPG proporcionó la siguiente información sobre el mártir:

 Nom de Guerre: Reşîd Serdar

 Nombre y apellidos: Mustafa Ertaş

 Lugar de nacimiento: Van

 Nombres de la madre y del padre: Çiçek - Şehabettin

 Fecha y lugar de defunción: 27 de mayo de 2020 / VAN
 

Reşîd Serdar nació en la zona de Nordiz y creció con la cultura kurda como miembro de la tribu Giravi. Era el hijo mayor de sus padres y se sentía responsable de su familia. Para ganarse la vida, empezó a trabajar pronto. Se encontraba entre los frentes del sistema capitalista y el estilo de vida de la sociedad kurda clásica. Ninguna de las dos formas de vida era lo que él buscaba. Durante un tiempo vivió fuera del Kurdistán, en una gran ciudad turca, y vio la realidad del Estado desde otra perspectiva. Regresó a su lugar de nacimiento, donde se casó a petición de su familia. Su búsqueda de una vida libre no terminó ahí. Participó en actividades jurídicas y así conoció mejor la realidad de su pueblo, que resistió persistentemente a pesar de todos los ataques. Para hacer justicia a esta lucha, al principio trabajó como miliciano y finalmente se unió a la guerrilla.

Reşîd Serdar participó en la organización de la resistencia por el autogobierno en Van y, con su trabajo disciplinado, contribuyó al éxito de muchas tareas críticas. Tras unos dos años en la región de Van, cruzó la frontera estatal turco-iraquí y llegó a las zonas de defensa de Medya. Allí tuvo la oportunidad de tratar intensamente el contenido de la filosofía del PKK y de examinar críticamente su propia personalidad a la luz de la ideología de la liberación de la mujer. Como comandante de zona, regresó finalmente a su tierra natal de Nordiz, donde luchó con gran valor y abnegación hasta el final.