La oficina de representación del HDP (Partido Democrático de los Pueblos) Hewler (Erbil) denunció la detención de sus miembros en un comunicado en el aniversario de la conspiración del 9 de octubre contra el líder kurdo Abdullah Öcalan.

“En primer lugar, condenamos la conspiración internacional contra Abdullah Öcalan hace 23 años. A lo largo de este período, el Sr. Öcalan ha estado en condiciones de aislamiento severas”, comenzó la oficina de representación.

“La conspiración internacional y el aislamiento agravado que siguió no pueden aceptarse. Debe saberse en sí son el resultado de la mentalidad y la política monista, negacionista y asimilacionista del Estado-nación”, continuó el comunicado.

“Durante estos 23 años, el Sr. Abdullah Öcalan no ha dado un paso atrás en la unidad democrática libre de los pueblos y la línea de solución democrática. Mientras que la lucha del Sr. Öcalan por una solución democrática fue acogida gradualmente por más personas, el gobierno del AKP-MHP insistió en sus políticas y prácticas opresivas y de rechazo que han traído problemas no solo a los pueblos kurdo y turco, sino también a todos los de la región.

Lo que hay que hacer en la etapa actual es abandonar la negación kurda e introducir una solución democrática a la cuestión kurda.

Como se indica en nuestra declaración, expresamos que todos nuestros problemas pueden resolverse mediante el diálogo y la negociación. Una lucha democrática común de todos los pueblos, en particular del pueblo kurdo, nos ayudará a lograrlo. La declaración de nuestro partido que se anunció al público el 27 de agosto brinda una oportunidad histórica para esto. Por lo tanto, un frente de democracia genuina se ha vuelto más imperativo que nunca.

Como saben, como representantes y miembros del HDP Hewler, cuatro de nosotros fuimos detenidos por las Hewler Asayish (fuerzas de seguridad locales), aunque por poco tiempo.

No podemos aceptar tales detenciones porque nosotros, como representantes de los partidos políticos, llevamos a cabo nuestras actividades oficialmente. Se conocen nuestras residencias, así como nuestras actividades. El Asayish puede visitarnos en cualquier momento, escuchar nuestras opiniones e informar un problema si lo hubiera. Por eso, esperamos que no se repita lo ocurrido ayer”, concluyó.