Los movimientos militares del KDP en la zona de la guerrilla a principios de junio han suscitado fuertes reacciones por la preocupación de una guerra interna kurda. Amigos del pueblo kurdo, así como artistas e intelectuales kurdos, han lanzado diversas iniciativas para alertar de ello. Por supuesto, era impensable que el pueblo y sus intelectuales permanecieran en silencio ante los ataques con fines de genocidio y ocupación, dado el nivel alcanzado en la lucha de liberación kurda.

Cabe suponer que la presión pública y la postura inequívoca de la población contra una guerra civil han obligado al KDP a reconsiderar sus acciones. Sin embargo, es claramente visible que un ala dominante dentro del KDP está haciendo todo lo posible para crear una situación de conflicto armado con la guerrilla para que se puedan cumplir los acuerdos alcanzados con el régimen fascista del AKP/MHP.

Continúa el traslado de tropas a las zonas de la guerrilla. Se sabe que una gran unidad con armamento pesado está esperando en Sheladize para ser trasladada a Rênçbiraxa con el fin de dividir la resistencia en los montes Zagros. Asimismo, se sabe que una operación militar de este tipo dará lugar a combates irreversibles con la guerrilla.

Se dice que Masoud Barzani ha dicho a los artistas kurdos que no permitirá otra guerra civil, pero sobre el terreno la situación parece diferente. O bien Masoud Barzani se limitó a hacer una declaración política, o bien se está intentando, en contra de su voluntad, desencadenar escaramuzas con la guerrilla. Los movimientos en Metina en los últimos días, la presencia de tropas del KDP en Sheladize y Amadiya, el despliegue de armamento pesado, las emboscadas en las rutas de conexión de la guerrilla, las trincheras y los puestos de control que se han construido, todo ello apunta a unos serios preparativos. Dado que esta acción ha aumentado su velocidad en los últimos días, la opinión pública debe conocerla.

Lo que es más desesperante es la información de que hace dos días, en una reunión en Metina, las unidades del KDP recibieron la orden de un alto comandante de las fuerzas especiales de atacar a los guerrilleros en sus respectivos lugares. Me pregunto si Masoud Barzani está al tanto de esta orden irresponsable o sabe que esa información se difunde entre la población. En mi opinión, es inconcebible que no lo sepa. Sin embargo, también hay que saber que esta instrucción y otras iniciativas similares de las propias fuerzas especiales del KDP suponen una grave amenaza.

El KDP está construyendo nuevas bases en Metina y enviando tropas a la región. Con sólo unos metros de distancia entre la guerrilla y el KDP, una provocación podría detonar en cualquier momento. Como muestran las imágenes publicadas por el periodista Seyit Evran, en la región se están llevando a cabo preparativos explícitos para la guerra.

Según las HPG, las fuerzas del KDP transmiten inmediatamente las coordenadas correspondientes al Estado turco cuando ven una unidad guerrillera. A esto le sigue inmediatamente un bombardeo, lo que no puede ser una coincidencia. Por lo tanto, es muy probable que las acciones del KDP obedezcan a una intensa instigación del Estado turco. Sin embargo, el KDP debe distanciarse de un conflicto interno. Desgraciadamente, se sabe que ciertos individuos dentro del KDP están intentando provocar dicho conflicto.

En resumen, no cabe duda de que se están realizando intensos y valiosos esfuerzos por la unidad nacional. Sin embargo, cada vez es más evidente que algunas declaraciones no tienen valor en la práctica sobre el terreno. La actitud del PKK respecto a esta cuestión es clara, y la guerrilla se esfuerza por comportarse con prudencia. No se puede decir lo mismo del KDP. La sinceridad significa que lo que se dice se pone realmente en práctica. Por esta razón, no creo que haya que cuestionar aquí las intenciones. La intención se presenta abiertamente en la situación actual.

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