El Newroz es para los kurdos un símbolo de la resistencia y la celebración del nuevo año. Este año, a causa de la crisis del coronavirus, numerosas celebraciones del Newroz se han cancelado y se ha invitado a la gente a celebrarlo desde sus balcones y ventanas.

El Gobierno Regional del Kurdistán impuso un toque de queda la semana pasada como parte de las medidas para contener la propagación de la pandemia del coronavirus.

Aún así, pese a la epidemia y los toques de queda, los fuegos del Newroz comenzaron a brillar en numerosas ciudades y pueblos de Bashur, especialmente en Suleimaniya.

Se prendieron numerosas hogueras por la noche, subrayando la victoria de Kawa el Herrero contra el brutal rey Dehak.

Varias familias y grupos de niños celebraron el año nuevo en más de 20 puntos de la ciudad.

La mayor celebración fue la del Movimiento Patriótico Juvenil. Tras un intento por extinguir el fuego, los bomberos decidieron dejar que la celebración continuara.

Los refugiados políticos celebraron el Newroz juntos en la región de la ciudad de Diya, en el distrito de Wulubah en Sulaymaniyah.