31 mujeres ejecutadas en Irán en 2024
En 2024, dos años después del inicio del levantamiento “Mujer, Vida, Libertad”, la República Islámica registró el mayor número anual de ejecuciones de mujeres de los últimos 17 años.
En 2024, dos años después del inicio del levantamiento “Mujer, Vida, Libertad”, la República Islámica registró el mayor número anual de ejecuciones de mujeres de los últimos 17 años.
La Comisión Iraní de Derechos Humanos (IHR) publicó un nuevo informe que revela datos impactantes sobre la ejecución de mujeres en Irán. El informe, titulado “Las mujeres y la pena de muerte en Irán: una ventana a la patología de género de la pena de muerte”, examina las dimensiones horrorosas y las desigualdades de género de este castigo inhumano.
Según el informe, en 2024, dos años después del inicio del levantamiento “Mujer, Vida, Libertad” (Jin, Jiyan, Azadi), la República Islámica registró el mayor número anual de ejecuciones de mujeres de los últimos 17 años, con 31 mujeres ejecutadas en cárceles iraníes. La cifra no tiene precedentes desde que la organización comenzó a registrar las ejecuciones en 2008. El informe se basa en estadísticas registradas y verificadas por la Comisión de Derechos Humanos de Irán.
Mahmoud Amiri-Moghaddam, director de la Organización Iraní de Derechos Humanos, dijo con motivo de la publicación del informe: “La ejecución de mujeres en Irán no sólo muestra la dimensión cruel e inhumana de la pena de muerte, sino que también expone la profundidad de la discriminación y la desigualdad de género en el sistema judicial del país. Hacemos un llamamiento a la comunidad internacional para que no permanezca en silencio ante estas injusticias institucionalizadas y el apartheid de género en Irán y para que redoble sus esfuerzos para salvar a las condenadas a muerte”.
Algunas estadísticas del informe son las siguientes:
Al menos 31 mujeres fueron ejecutadas en 2024, el mayor número de mujeres ejecutadas en más de 15 años.
Al menos 241 mujeres fueron ejecutadas entre 2010 y 2024.
121, la mitad de las mujeres ejecutadas, fueron identificadas sólo por su nombre y apellido o permanecieron completamente anónimas.
114 mujeres fueron condenadas y ejecutadas por asesinato por qisas nafs (un término islámico que significa “represalia en especie”).
107 mujeres fueron condenadas a muerte por cargos relacionados con drogas.
Cuatro mujeres fueron ejecutadas por cargos de seguridad de moharebeh (enemistad contra Dios) y corrupción en la tierra; una de ellas era judía y dos eran prisioneras políticas kurdas.
9 de las mujeres ejecutadas eran esposas niñas.
El 70 por ciento de las mujeres ejecutadas por homicidio intencional fueron acusadas de asesinar a su cónyuge/pareja.
Las mujeres de regiones desfavorecidas como Sistán y Baluchistán se encuentran desproporcionadamente entre las ejecuciones relacionadas con las drogas; esta estadística refleja la intersección de la discriminación sistémica, la pobreza y el sesgo judicial.
Ejecuciones a la sombra de la violencia doméstica
Muchas de las mujeres ejecutadas por homicidio fueron víctimas de violencia doméstica o violación previamente y fueron obligadas a hacerlo. Alrededor del 70 por ciento de ellas fueron acusadas de matar a sus esposos, mientras que la mayoría estaban atrapadas en matrimonios abusivos. Sin embargo, el sistema judicial de Irán rara vez tiene en cuenta esas circunstancias al dictar sentencia.
Pobreza, aislamiento y falta de vivienda
Las mujeres condenadas a muerte suelen ser excluidas de sus familias y obligadas a soportar solas condiciones carcelarias inhumanas. La pobreza y la falta de alfabetización, en particular entre las mujeres pertenecientes a minorías étnicas, les impiden defenderse eficazmente y aumentan su vulnerabilidad.
Ejecuciones relacionadas con drogas
Entre 2010 y 2024, al menos 107 mujeres fueron ejecutadas por delitos relacionados con las drogas. Las reformas legales de 2017 condujeron inicialmente a una disminución de las ejecuciones, pero la tendencia alcanzó su nivel más alto en nueve años en 2024. Muchas de estas mujeres fueron obligadas a cometer delitos relacionados con las drogas bajo coacción o incluso desconocían su papel en ellos. Sin embargo, el poder judicial de la República Islámica rara vez tiene en cuenta estos factores al dictar sentencias de muerte.
Siguen dictándose sentencias de muerte contra mujeres
Los resultados de un estudio de dos años realizado por la Organización Iraní de Derechos Humanos sobre los medios de comunicación oficiales de la República Islámica muestran que al menos 47 mujeres fueron condenadas a muerte entre enero de 2022 y enero de 2024.
Mujeres condenadas a muerte: la voz silenciosa de la justicia
Un número indeterminado de mujeres siguen esperando la pena de muerte, pues sus vidas corren peligro en cualquier momento. Entre ellas se encuentran las activistas kurdas Warisha Moradi y Pakhshan Azizi, que se encuentran en el corredor de la muerte. Desde la fundación de la República Islámica, las ejecuciones se han utilizado como herramienta de represión política y han ayudado al régimen a sobrevivir al crear miedo. Decenas de miles de hombres y mujeres han sido ejecutados tras juicios falsos y armados, pero las historias de las mujeres y las dimensiones de género de la pena de muerte siguen ocultas en las sombras.