El gobierno de Polonia declara la guerra a las mujeres
Entrevista con la periodista y activista Martyna Katarzyna sobre la situación actual en Polonia en relación con la "Ley del aborto y los derechos de la mujer".
Entrevista con la periodista y activista Martyna Katarzyna sobre la situación actual en Polonia en relación con la "Ley del aborto y los derechos de la mujer".
En una entrevista con ANF, Martyna Katarzyna habló de la situación actual en Polonia sobre "La ley del aborto y los derechos de las mujeres" - Katarzyna es una activista y periodista que vive en Varsovia y sigue de cerca la situación actual.
¿Cuál es la situación actual en Polonia en relación con los derechos de la mujer?
Desde que el partido PiS llegó al poder, los derechos de las mujeres en Polonia están amenazados. El mayor problema está relacionado con la ley del aborto. Polonia es uno de los países con la ley de aborto más estricta, donde la interrupción del embarazo está legalmente permitida sólo en casos de violación o incesto, malformaciones letales del feto, o si el embarazo pone en peligro la salud o la vida de la mujer.
El partido gobernante ha intentado restringir la ley aún más desde 2016. Otro ejemplo de que el gobierno está atacando los derechos de la mujer es la retirada de la Convención de Estambul.
Como saben, la "Convención de Estambul" es un tratado que previene la violencia contra la mujer y la violencia doméstica. Sin embargo, el gobierno polaco ha anunciado que le gustaría abandonar la convención.
¿Qué beneficios tiene esta convención en Polonia y qué crees que pasará si Polonia abandona la "Convención de Estambul"?
La Convención de Estambul fue ratificada en Polonia en 2015, ¡hace sólo 5 años! El tratado cambia significativamente y expande ciertas definiciones importantes. Por ejemplo, la ley polaca clasifica la violación como un acto sexual violento realizado con el uso de la fuerza o el engaño, y no incluye la falta de consentimiento de la víctima, lo que sí hace la Convención de Estambul.
Es importante señalar que las normas polacas neutrales contra la violencia doméstica no tienen en cuenta la violencia contra la mujer en particular. Según la fundación Ordo Iuris, la Convención de Estambul se centra demasiado en la violencia contra la mujer en sí misma, en lugar de hacer hincapié en las diferentes fuentes de violencia, por ejemplo, la adicción. En resumen, la Convención de Estambul llena cualquier laguna en la legislación polaca ya existente en relación con la violencia doméstica y facilita su prevención.
La retirada de Polonia del tratado significa un enorme paso atrás: pone a las mujeres en peligro y deja mucho margen para la interpretación y las irregularidades en muchas áreas y aspectos de la violencia doméstica. Creo que es absolutamente horrendo que el actual gobierno quiera retirarse del tratado que tiene como objetivo proteger a sus ciudadanos.
La ley del aborto ha provocado manifestaciones y protestas masivas en Polonia. Como sabemos, la "ley del aborto" es una amenaza tanto para la libertad de las mujeres como para sus cuerpos. También significa que al gobierno le gustaría poder determinar la decisión que tomas sobre tu propio cuerpo y tu derecho. ¿Qué opinas de esto?
Como muchas mujeres en Polonia y en todo el mundo, creo que es indignante que el partido gobernante, sabiendo muy bien que la mayoría de la sociedad está en contra de restringir las leyes del aborto, siga atacando nuestra autonomía corporal. Lo que es aún más perturbador es el hecho de que lo hicieron en medio de una pandemia mundial, sabiendo que la decisión del Tribunal Constitucional hará que la gente salga a protestar en las calles.
Creo que una mujer, en cualquier circunstancia, debe tener acceso a un aborto seguro, debe tener el derecho de elegir por sí misma. Nadie, y especialmente ningún hombre, tiene el derecho de decirle qué hacer con su cuerpo. Muchos pro-vida tienen un concepto erróneo sobre el aborto que conduce a los caminos de la eugenesia, pero eso no es así. Es mucho más simple: las mujeres quieren decidir qué hacer con su propia vida, si no quieren ser madres, deberían ser capaces de tomar esa decisión vital, incluso si tienen que recurrir a su último recurso: el aborto. Es un derecho humano básico.
Por último, ¿cuál es el objetivo del gobierno sobre todo esto? ¿Qué es lo que quieren hacer?
Es difícil para mí decirlo, pero por lo que he observado desde el comienzo del ascenso al poder del PiS es que los derechos de las mujeres (y LGBTQ+) han estado en constante peligro. Si consideramos la prohibición del aborto en relación con el programa de asistencia social 500+ (que tiene por objeto alentar a la gente a tener descendencia ofreciendo un pago mensual por cada hijo) y la narrativa conservadora en general, podemos llegar a la conclusión de que el aumento de la población en Polonia constituye un objetivo importante para el gobierno.
La amenaza de que los derechos de la mujer no sólo sean violados sino que sean completamente eliminados es un temor racional de muchas personas que viven en Polonia. Otro hecho importante es que el gobierno polaco no ha tenido éxito en la lucha o incluso en el control de la pandemia COVID-19. Actualmente, estamos en crisis - carecemos de personal y equipo médico, y tenemos miles de casos cada día.
Volviendo a mi punto anterior - el PiS sabía muy bien que cualquier decisión repentina sobre la prohibición del aborto haría que los ciudadanos protestaran y salieran a las calles. Pero exigen a la gente sean coscientes sobre el coronavirus y permanezcan en casa, ya que representan una amenaza para la salud pública. Se habla de anunciar el estado de emergencia y perseguir a los que participan y organizan las protestas (ya ha habido intentos de arresto contra los organizadores). La narrativa del PiS culpa claramente a los manifestantes de la crítica situación de Polonia.
También es importante recordar que hay ciertas organizaciones de valores cuestionables en Polonia, como la ONR (Campamento Nacional Radical), que atacan a las mujeres que protestan durante las marchas. Esos grupos son respaldados abiertamente por el PiS. En su más reciente proclamación, Jarosław Kaczyński pidió a sus partidarios que "defendieran las iglesias" y básicamente declaró la guerra contra las mujeres. Es inaceptable que una de las personas más importantes (con o sin derecho) del gobierno llame descaradamente a una guerra civil.
El discurso de Kaczyński implica directamente la extrema polarización de la sociedad polaca y la empeora. El PiS nunca ha hecho nada para construir puentes entre la derecha y la izquierda en Polonia. Con su horrenda narrativa discriminatoria y sus acciones despiadadas sólo contribuyen a la constante expansión de la brecha entre sus partidarios, y aquellos que quieren vivir en un país progresista, donde todos son bienvenidos y aceptados por lo que son.