La periodista kurda Derya Ren ha sido puesta en confinamiento solitario durante tres días por el comité disciplinario de la prisión de mujeres en Amed (tr. Diyarbakır). La corresponsal de la agencia de noticias de mujeres JinNews está acusada de resistirse a los funcionarios de prisiones.

El trasfondo de la llamada medida disciplinaria es un registro corporal rechazado. La periodista, que se encuentra en prisión desde octubre pasado por sentencia firme, iba a ser obligada a someterse a un registro al desnudo tras ser trasladada a prisión. Debido a que Ren se negó a someterse al trato degradante y dio una pelea masiva, cinco guardias la golpearon, insultaron y arrastraron por el suelo del cabello, según su abogado, Gülistan Ataş.

Ren emprendió acciones legales contra el personal de la prisión y presentó una denuncia por agresión. Pero en lugar de castigar a los oficiales, la víctima fue sancionada.