La primera audiencia del caso contra 33 mujeres, que habían sido detenidas durante un evento el 12 de agosto de 2020 en el que se denunciaba la decisión del gobierno de retirarse del Convenio de Estambul, se llevó a cabo hoy en el 28 ° Tribunal Penal de Primera Instancia de Ankara.

Las mujeres, que son juzgadas sin arresto, estaban preparadas para hacer una declaración frente al juzgado donde se realizó la audiencia. La policía tomó medidas enérgicas contra el grupo y detuvo a unas 20 mujeres, incluidas las que estaban siendo juzgadas por el caso.

En respuesta a la violencia policial, las activistas organizaron una marcha de protesta y denunciaron: “Las mujeres están siendo juzgadas aquí porque dicen que la Convención de Estambul debería implementarse. Nosotras, las mujeres, implementaremos la Convención”.

La policía también atacó la marcha con gases lacrimógenos. Los periodistas también fueron objeto de violencia policial en la capital turca. El teléfono celular de la reportera de Jinnews Dilan Babat, que quería grabar un video, fue incautado por la policía y arrojado al suelo. El reportero de la Agencia Mezopotamya (MA), Hakan Yalçın, también fue objeto de violencia policial.

Una parte del comunicado de prensa que las mujeres no pudieron hacer frente al juzgado antes de la audiencia es la siguiente:

“Hemos venido a condenar al estado masculino que no puede tolerar que exijamos ni siquiera nuestros derechos más legítimos. Este caso es el caso de todas las mujeres. Hoy, la lucha de las mujeres está siendo procesada en estos tribunales. El gobierno encubre las muertes sospechosas y alienta a los feminicidios con sus políticas de impunidad y todo tipo de retórica sexista y misógina. Serán juzgadas, no las mujeres que defienden sus derechos y sus vidas”.

33 mujeres en juicio

Las 33 mujeres están acusadas de "oponerse a la ley de manifestaciones y marchas n° 2911".

Las diputadas del Partido Democrático de los Pueblos (HDP) Filiz Kerestecioğlu, Züleyha Gülüm y Semra Güzel y abogados estuvieron presentes en la audiencia. Las mujeres sometidas a juicio no entraron a la sala del tribunal, protestando por la detención de sus amigas. Tampoco se permitió la entrada a la sala de audiencias a representantes de Amnistía Internacional y periodistas.

Los abogados y las acusadas ​​denunciaron el ataque policial a las mujeres antes de la audiencia y se negaron a defenderse.

El tribunal rechazó la solicitud de los abogados de presentar una denuncia penal contra los agentes de policía que maltrataron a abogados y mujeres y no les permitieron ingresar al tribunal. La audiencia se aplazó hasta el 26 de noviembre.