Jinwar, la aldea de mujeres de Rojava, ha anunciado que han comenzado los preparativos para desarrollar e inaugurar el nuevo proyecto de atención sanitaria para mujeres y niños.
En una declaración publicada por Jinwar, las mujeres dijeron: "A lo largo de la historia las mujeres se han ocupado de la salud de sus comunidades debido a nuestra relación de cercanía con la naturaleza y nuestro papel de cuidadoras en todas las sociedades. Este conocimiento, así como nuestro papel, nos fue arrebatado por la religión y la ciencia. Los hombres se convirtieron en los dueños de este conocimiento y las mujeres fueron relegadas a un mero objeto de estudio".
Las mujeres de Jinwar añadieron que "hoy en día, la mayoría de las mujeres están alienadas de sus cuerpos y sufrimos todo tipo de problemas de salud, muchos de ellos relacionados con la dinámica social de la opresión". Las raíces de esta opresión están profundamente arraigadas en nuestra historia, ha sido así durante miles de años y hasta hoy es ampliamente aceptada en nuestra sociedad".
En un lugar como Jinwar, subrayaron, las mujeres están "construyendo una alternativa a la sociedad patriarcal, redescubriendo y restableciendo colectivamente nuestra libertad de manera ecológica, la salud se convierte en un tema ineludible".
Estar "sano", dijeron, "es sentirse física, mental y emocionalmente bien en relación con la sociedad en la que se vive". Por lo tanto, nuestra salud es también una consecuencia de la forma en que funciona nuestra sociedad, de nuestra comprensión del amor y de la vida y de nuestros valores. Cuanto más sano sea el entorno y el modo de vida y cómo crezcan los niños, más sana será la sociedad".
El proyecto del Centro de Salud Şifajin tiene como objetivo combinar "la atención médica convencional con la medicina natural, abriendo el proyecto también a la educación y a la discusión para recuperar el conocimiento y la comprensión de la salud y la vida según una sociedad que tiene que ser democrática, ecológica y en la que las mujeres viven como mujeres libres".