Según la información recibida, personas kurdas en el centro de París y en los suburbios de Drancy y Villiers-le-Bel fueron objeto de redadas policiales.

Diez personas kurdas fueron detenidas en las redadas de la mañana del 15 de mayo.

Se sabe que la tensión en el aeropuerto de Roissy-Charles-de-Gaulle a finales de marzo mientras se intentaba impedir la deportación de un refugiado kurdo de Francia fue utilizada como motivo para las detenciones.

Una treintena de personas protestaron el 27 de marzo en la terminal 1 de Roissy contra la deportación de un refugiado kurdo, que había sido deportado sumariamente a pesar de las intensas protestas y de que se sabía que sería arrestado en Turquía. Hubo tensión por la intervención violenta de la policía contra los manifestantes.

Se informó que alrededor de 50 agentes de policía participaron en la operación de detención en París y sus alrededores. La fiscalía de Bobigny remitió la investigación a la policía de fronteras.