La policía del Estado de Alemania continúa con sus políticas de criminalización contra toda simbología kurda. Particularmente, la policía bávara ha estado implementando prohibiciones contra las banderas de las YPG y las YPJ, y las fotografías del líder del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan. Ahora, además, las unidades policiales han mostrado su intolerancia en Munich contra la fotografía de Mazlum Dogan, símbolo del pueblo kurdo en su lucha por la libertad.

Durante las celebraciones del Newroz en Munich la semana pasada, el activista kurdo Azad Yusuf Bingol sostuvo una pancarta en la que aparecía la fotografía de Mazlum Dogan, cuadro principal del PKK caído mártir en la cárcel de Diyarbakir el 21 de marzo de 1982, y podía leerse “Berxwedan Jiyane” [Resistencia es Vida]. La policía de Munich inició una investigación contra Bingol inmediatamente después del evento, citando la fotografía de Mazlum Dogan como excusa.

‘La opresión no puede intimidarme’

La policía alegó que la fotografía de Mazlum Dogan es propaganda del PKK y citó a declarar al activista kurdo. Anteriormente, la policía ya realizó una redada en casa de Azad Yusuf Bingol por ondear banderas de las YPG/YPJ, sometiéndolo a varias investigaciones. Bingol ha emprendido acciones legales contra la policía a través de su abogado.

Hablando con ANF, Bingol ha explicado: “La opresión y las investigaciones no pueden intimidarme. Hago un llamamiento a la policía para que deje de emprender investigaciones contra mí en cada evento en que me vean con cualquier pretexto”. Bingol ha comentado que sostenía la pancarta en cuestión cuando se encontraba saltando la hoguera del Newroz: “Mazlum Dogan es el Kawa moderno, quien inició la resistencia del Newroz. Continuaré llevando su fotografía con orgullo, pese a las prohibiciones y las investigaciones”.

Bingol ha contado que la institución de inteligencia doméstica, la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, envió una carpeta a la policía para extranjeros de Munich sobre él, y ha continuado: “Cuando comprendieron que no iba a dar un paso atrás por las investigaciones y las multas, enviaron una carpeta sobre mí en la que aparece todo lo que he estado haciendo durante los últimos 10 años, solicitando cancelar mi permiso de permanencia. He sabido que han incluido una foto que me hice con Sakine Cansiz, la revolucionaria kurda asesinada en París en 2013, como evidencia.

Prohibiciones en Baviera

Las unidades policiales y los tribunales de Baviera, donde se encuentra el gobierno más conservador y de derechas de toda Alemania, tienen por objetivo todo individuo que muestre su solidaridad con las YPG y las YPJ. Hace poco, el activista Claus Schreer de 80 años de edad fue multado con 2.800 euros por sostener una pancarta en la que podía leerse “Libertad para Öcalan” con una fotografía de Öcalan y la bandera de las YPJ.

La policía de Baviera ha prohibido las banderas de las YPG y ha estado llevando a cabo redadas en los domicilios de aquellos que han publicado banderas de las YPG o fotografías de combatientes de las YPG en sus redes sociales. Pero pese a las prohibiciones, la opresión y las investigaciones, los activistas alemanes se muestran cada vez más interesados por la lucha de liberación kurda. La policía de Munich registra este apoyo en su informe del año pasado.

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