Karasu: “La política de alianzas debe ser apreciada y desarrollada”

Compartimos la segunda parte de la entrevista con el miembro del Consejo Ejecutivo de la KCK, Mustafa Karasu, quien habla sobre los resultados de las elecciones locales en Turquía y el Kurdistán Norte.

Análisis

En la segunda parte de este análisis, Mustafa Karasu, miembro del Consejo Ejecutivo de la Confederación de los Pueblos del Kurdistán (KCK), habla sobre los resultados de las elecciones locales en Turquía y el Kurdistán Norte o Bakur (la parte del Kurdistán que quedó dentro de las fronteras geopolíticas de Turquía tras el Tratado de Lausana a principios del siglo XX).

La primera parte de este análisis, centrado en el 1 de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, y el significado del mes de mayo para el movimiento de liberación kurdo, puede leerse aquí.

Haciendo un repaso de las elecciones municipales en Kurdistán Norte y Turquía; ¿Cómo las evalúa? ¿Comparte la opinión de que el AKP ha perdido y ha comenzado una nueva era en Turquía?

Creo que hay que evaluar a fondo los resultados de las elecciones municipales del 31 de marzo. El pueblo kurdo y las fuerzas democráticas deben analizarlo bien. Con estas elecciones, la forma liberalizada del 12 de septiembre iba a llegar al poder. Se iba a crear una nueva Turquía. De hecho, Erdoğan iba a crear la Turquía que se pretendía mediante el golpe de Estado del 12 de septiembre. Pero aquí está el gobierno 22 años después, claramente sin haber logrado sus objetivos. Especialmente en los últimos nueve años, la asociación entre el AKP y el MHP ha descendido realmente sobre los pueblos de Turquía como una pesadilla. Se estableció un orden de opresión sin precedentes, y acabó por oprimir tanto al pueblo kurdo como al turco. El AKP-MHP creó la polarización en la sociedad turca con una política que no tiene precedentes en ninguna parte del mundo. Ningún otro país fascista ha hecho algo así.

Hay una situación en la que un vecino mira al otro como si fuera un enemigo. Se ha aplicado una guerra especial a toda la sociedad. Si esto no hubiera durado tanto, tal vez la sociedad habría podido soportarlo. Pero se ha librado una guerra especial tan prolongada que la sociedad ha acabado mostrando una gran reacción ante ella. De hecho, podemos decir que la razón por la que el gobierno del AKP retrocedió tanto el 31 de marzo fue en realidad por una revuelta inspirada por los valores justos de la sociedad. Los derechos, la justicia, la ley, la conciencia y la igualdad; estos valores existen únicamente en la sociedad. Y la sociedad se rebeló porque todos estos valores estaban siendo duramente atacados. Había opresión y explotación.

Por supuesto, el gobierno fascista del AKP-MHP perdió, y esta pérdida realmente inició un nuevo curso en Turquía. De hecho, las elecciones presidenciales y parlamentarias de mayo de 2023 ya produjeron resultados similares. El gobierno hizo trampa y jugó sucio allí también. Desde entonces, el gobierno no ha hecho nada para aliviar el malestar de la sociedad. Al contrario, se sintieron cómodos por su éxito en las elecciones anteriores. En realidad, también entonces habían perdido las elecciones. Tenemos que verlo así. ¿Cómo si no se explica que haya habido un cambio tan grande en diez meses? El cambio ya existía antes. Quiero señalar esto: las elecciones estaban amañadas. El pueblo de Turquía realmente respiró aliviado en estas elecciones. Y este aspecto es muy importante. La idea de que el AKP no podía ser derrotado parecía casi indiscutible. Había atado a toda la sociedad a sí mismo con su guerra especial. Y esto se ha roto.

Hay una cita de Abraham Lincoln. En realidad es un dicho muy bueno: “Puedes engañar a todas las personas una parte del tiempo y a algunas personas todo el tiempo, pero no puedes engañar a todas las personas todo el tiempo”. Porque la sociedad es un fenómeno histórico. El individuo puede verse afectado aquí y allá, pero en términos de integridad de la sociedad, en términos de su sentido de los derechos, la justicia y la igualdad, la sociedad siempre ha tenido la sartén por el mango. Lo hemos visto en las elecciones. En este sentido, las elecciones fueron una gran victoria. Pero no hay que suponer que todo cambiará sólo con las elecciones. Bahceli dijo abiertamente: “No construimos este país con una urna”. Erdoğan lleva la misma mentalidad. Erdoğan no está a punto de renunciar a su poder; no son demócratas.

Estas elecciones no deben considerarse un éxito completo, sino un comienzo. Sería un error pensar que estas elecciones lo arreglarán todo. En estas elecciones se ha manifestado la tendencia democrática de la sociedad. Esto es, en cierto modo, el éxito del frente democrático. Debemos verlo así. Fue la postura unida de la parte democrática de la sociedad la que mostró su poder en estas elecciones, fue también la actitud del pueblo kurdo.

El pueblo kurdo se opuso a la política fiduciaria. Quería asumir la administración local de sus propias tierras. Quiere gobernar localmente sus propias ciudades en Kurdistán. Pero hay un problema fundamental para los kurdos y las kurdas; la principal tarea del pueblo kurdo es encontrar una solución democrática a la cuestión kurda. Los kurdos y las kurdas llevan más de 40-50 años librando una gran lucha por la democracia. Luchan por la libertad del pueblo kurdo y, al mismo tiempo, luchan por la democratización de Turquía. Porque la cuestión kurda no puede resolverse sin la democratización de Turquía.

En este sentido, si preguntamos por qué los kurdos mostraron tal actitud en las elecciones y por qué se unieron a todos los que quieren la democracia, la respuesta es clara: porque la cuestión kurda sólo puede resolverse mediante la democratización de Turquía. En este sentido, los kurdos y las kurdas basan su actitud en si la democratización se desarrollará o no. No se trata de la elección de tal o cual partido o de la victoria de tal o cual partido.

¿Se desarrollará o no la democratización? ¿Aumentará la tendencia a la democratización en la sociedad turca? Estas son las principales preguntas. La actitud de los kurdos y de las kurdas se basa en esto.

Como hemos dicho antes, no es que vaya a venir una persona a resolver la cuestión kurda. Semejante expectativa simplemente muestra una concepción errónea de la realidad de Turquía. Significa que no se ha entendido la política kurda del Estado turco. ¿Se producirá una ruptura en Turquía? ¿Se democratizará? Las respuestas a estas preguntas pueden acercarnos a la solución de la cuestión. Quien piense que la cuestión kurda se resolverá sin la democratización de Turquía, o que alguien que no es democrático vendrá a resolverla, demuestra que no ha comprendido al enemigo. Nos enfrentamos a quienes quieren cometer un genocidio contra los kurdos, contra la realidad kurda, y dominarlos. Lo que quieren es destruir completamente al pueblo kurdo. Esta es su política básica, fundamental. Y esto sólo puede cambiar con una mentalidad democrática. En este sentido, a la pregunta de por qué los kurdos y las kurdas tomaron esa decisión, la respuesta es clara. Si Turquía se democratiza, si los votos del pueblo sirven para la democratización, es por la actitud de los kurdos. Porque para los kurdos no importa quién sea elegido, sino si hay un desarrollo hacia la democratización de Turquía o no.

Por otro lado, tenemos que ver lo que hay que hacer ahora. Las elecciones se celebraron; el CHP llegó al poder. No se puede esperar demasiado de ellos. Por supuesto, el pueblo tiene exigencias porque el CHP se convirtió en el primer partido como resultado de la actitud conjunta de todas las fuerzas democráticas. Hay expectativas, hay exigencias claras del pueblo y de la sociedad. Es necesario desarrollar la lucha por la democratización. Es necesario allanar el camino para ello. Si es así, se podrá evaluar correctamente un proceso positivo. Si los resultados se evalúan así, se avanzará en la democratización de Turquía. Lo mismo se aplica a la solución de la cuestión kurda.

Por supuesto, hay que presionar a los partidos políticos; es necesario que respondan a las exigencias de la democratización. Uno de los objetivos de una sociedad organizada es ejercer influencia en la política, dirigir y liderar la política. Eso es lo que quiere la sociedad. Cuando se trata de la realidad de Turquía, es necesario luchar por su democratización. Es necesario construir alianzas para ello. Es necesario desarrollar formas y métodos de lucha para ello. La lucha por la democracia no puede desarrollarse sin alianzas. La democratización no se desarrollará en Turquía si los kurdos y las kurdas se limitan a decir que elegirán sus propios municipios en Kurdistán y ya está. En este sentido, tenemos que aprovechar el entorno actual para la democratización de toda Turquía.

El poder organizado, las alianzas y las luchas de la sociedad cambiarán mucho. Wan está lleno de lecciones muy importantes. ¿Por qué le dieron a Abdullah Zeydan el certificado de elección en Wan? Se lo dieron como resultado de una gran lucha. El pueblo de Wan se levantó para conseguirlo. Las fuerzas democráticas apoyaron a Zeydan. Todas las fuerzas socialistas le apoyaron. La oposición dentro del sistema también apoyó la actitud del pueblo de Wan. No aceptaron la política del gobierno. No aceptaron la usurpación de ese certificado como pretendieran desde el gobierno. Es necesario ser conscientes de ello. Si no fuera por esta resistencia, se habrían nombrado fideicomisarios no sólo en Wan sino también en otros municipios del Kurdistán. Cada uno de ellos habría sido privado de su municipio por tal o cual razón. Cuando la Junta Electoral Suprema (YSK) anunció que Abdullah Zeydan debía recibir el certificado, sabía que si no lo hubiera hecho, Amed, Elîh, Şirnex, Şirnex, Qers, Colemêrg y todas las provincias kurdas se habrían sublevado. Todo el Kurdistán habría sido como Wan.

El servicio de inteligencia turco (MIT) entregó un informe en el que afirmaba que si no se entregaba el certificado de elección en las horas siguientes, todas las ciudades kurdas, especialmente Amed, se rebelarían hasta el iftar como pronto. El MIT entregó este informe a Erdoğan y, por supuesto, para evitar tal situación, Erdoğan dijo inmediatamente al presidente del YSK que entregara el certificado a Abdullah Zeydan. Erdoğan hizo más tarde una declaración, diciendo descaradamente: “Algunas organizaciones terroristas intentaban provocar y nosotros lo impedimos”.

La lucha de Wan y la actitud de la gente en Sirnex y otras ciudades fueron eficaces. De hecho, el gobierno tomó una decisión antes de las elecciones; iban a nombrar fideicomisarios, como en 2019. Pero fueron demasiado débiles en las elecciones. La oposición se hizo más fuerte, y el CHP se convirtió en el primer partido. Más concretamente, la sociedad turca reaccionó contra el AKP y el MHP; mostró una tendencia hacia la democratización que debilitó la mano del gobierno actual. En este proceso, cuando el pueblo de Wan se levantó, esto afectó a todo el Kurdistán. A cambio, el gobierno se vio obligado a dar un paso atrás. Esto sucedió con el desarrollo de luchas y alianzas. De hecho, la resistencia de Wan creó una alianza natural. Esto es muy valioso. Lo que hay que hacer ahora es desarrollar la alianza de la democracia. Existía la Alianza del Trabajo y la Libertad; hay que ampliarla aún más.

Quiero hacer hincapié en este punto. Los que se oponen a la política de alianzas son los que quieren debilitar la lucha del pueblo kurdo por la libertad. Consciente o inconscientemente, no importa. La política de alianzas debe ser apreciada y desarrollada. Puede haber deficiencias y errores, pero desarrollemos alianzas. Incluyamos a todas las partes de la sociedad. Esto no puede hacerse diciendo simplemente que sólo nos organizaremos sin alianzas. Haremos alianzas fuertes organizándonos. Si no nos organizamos, no podremos formar alianzas fuertes. Pero no se puede lograr mucho si sólo nos organizamos nosotros mismos. Necesitamos desarrollar nuestra organización en Turquía a través de alianzas, necesitamos expandirnos. Tenemos que darle mucha importancia a esto. Existen enfoques estrechos e inadecuados a este respecto; tenemos que superarlos. Si queremos democratizar Turquía y resolver la cuestión kurda sobre la base de la democratización, tenemos que dar gran importancia a esta política de alianzas. Esto debe hacerse en un espectro muy amplio. Es cierto que no se puede estar de acuerdo en todo. Es una realidad, pero hay que ser conscientes de que, en todo el mundo, la democracia siempre se ha desarrollado a través de alianzas.

La lucha contra el reaccionarismo, el fascismo y los regímenes autoritarios se basa en alianzas. Entonces, ¿qué hay que hacer a partir de ahora? Tenemos que mejorar nuestra organización. Tenemos que desarrollar nuestra organización en Turquía y en el Kurdistán Norte. Debemos organizar especialmente a los jóvenes y a las mujeres y, al mismo tiempo, desarrollar alianzas tanto en el Kurdistán como en Turquía. Hay que dar importancia a las alianzas tanto en el Kurdistán como en Turquía. Los enfoques que no valoran las alianzas en Turquía son erróneos. Todos los demás partidos políticos del Kurdistán deberían buscar alianzas con las fuerzas democráticas de Turquía. Si esto ocurre, creo que los resultados de las elecciones serían magníficos. Si no hay una lucha unida, el gobierno del AKP y del MHP continuará con sus políticas opresivas.

Si el gobierno de Turquía no tiene una mentalidad democrática, si no puede proponer una solución y un enfoque democráticos a la cuestión kurda, entonces atacará la lucha del pueblo kurdo. Porque la realidad del Estado turco, ya sean sus leyes o su Constitución, se basa en reprimir la lucha del pueblo kurdo por su liberación.

Es diferente cuando no hay lucha. Pero si hay lucha, como ahora, por supuesto que atacarán. Ya antes de las elecciones se preveía que atacarían independientemente del resultado de las elecciones. Se dijo que podrían suavizar su enfoque después de las elecciones. Eso no es cierto. A la gente le gustan las preguntas: “¿Se detendrá la guerra contra el pueblo kurdo?” o “¿Se aceptará la organización democrática y la lucha democrática del pueblo kurdo?”. Por el momento no existe tal cosa. El otro día, el ministro de Justicia dijo: “Si actuáis como os decimos, os permitiremos existir”. En otras palabras, está diciendo que renunciemos a ser kurdos. Critica al Partido DEM. ¿Por qué? Porque el Partido DEM defiende el kurdismo, porque quiere que se resuelva la cuestión kurda.

Cuando el gobierno nombró fideicomisarios para los municipios kurdos, ¿qué fue lo primero que hicieron? En primer lugar, cerraron todas las instituciones kurdas y de mujeres. Su opresión continuó porque no hubo resistencia. ¿Cuál era su justificación? El separatismo. Su justificación siempre fue “patria-nación-Sakarya”.

Ahora están poniendo la bandera en la agenda. Esto es incorrecto. Rêber Apo habló de su posición respecto a la bandera hace 30 años. Dijo que no teníamos ningún problema con ella. El problema no es la bandera, sino la connotación chovinista que se le atribuye. El problema es la mentalidad “Patria-nación-Sakarya”. Quieren influir en la sociedad manipulándola a través de la bandera. Quieren aumentar la presión diciendo: “Mirad, esto es lo que le han hecho a nuestra bandera”.

Ahora están debatiendo la Constitución en un ambiente en el que se intensifican esos resentimientos. Han encarcelado a miles de políticas y políticos, utilizan el poder judicial y los tribunales como garrote, recurren a todo tipo de opresión. Todos los días detienen a nuevas personas. Durante 7 años, Erdoğan ha estado deteniendo gente arbitrariamente. ¿Por qué mete en la cárcel a una mujer de 80 años? Erdoğan está matando a enfermos en las cárceles. El mensaje que envía a los kurdos y a las kurdas es el siguiente: “Mirad, estamos dispuestos a mataros a todos. Si lucháis, así es como responderemos”. En semejante ambiente de opresión es como se pretende celebrar un debate Constitucional.

El sentido de una Constitución es que hace que un Estado sea más democrático. Sólo los izquierdistas y demócratas exigieron la abolición de la Constitución del 12 de septiembre. Llevan más de 40 años expresando la necesidad de una nueva Constitución. Desde la Constitución del 82, los kurdos y las kurdas son los que más han expresado la necesidad de un cambio para una solución democrática. Erdoğan y Bahceli también quieren un cambio de Constitución, pero su objetivo es desarrollar una que sea peor que la Constitución del 12 de septiembre. Si ni siquiera aplican su Constitución actual, ¿cómo se puede esperar que apliquen una nueva?

Por supuesto, los kurdos y las kurdas quieren una nueva Constitución más que nadie porque las características de la actual están completamente basadas en el genocidio kurdo. Esta es la esencia de la Constitución actual. Turquía tiene una Constitución de un solo artículo; todos los demás artículos dependen de él. ¿Y cuál es ese único artículo? El genocidio de los kurdos. Por lo tanto, por supuesto, los kurdos y las kurdas quieren que cambie, pero de momento no hay mentalidad democrática ni terreno para ello. Hay que crear ese ambiente democrático; todo el mundo tiene que exponer sus ideas al respecto. Los kurdos y las kurdas son criticados en cuanto abren la boca porque hablan kurdo, lo que llaman una “lengua desconocida”. ¿Cómo va a haber una Constitución democrática si ni siquiera se acepta la existencia de la lengua kurda? ¿Cómo va a haber una Constitución sin que los kurdos y las kurdas expresen sus derechos y reivindicaciones sobre una base democrática? En primer lugar, hay que crear un entorno democrático. De lo contrario, los debates en curso carecen de sentido. El proceso de elaboración de una Constitución debe verse como una lucha por la democratización.

Ozgur Ozel dijo algo sobre Erdoğan, que es un buen político pero una mala persona. Es obvio que Erdoğan es una mala persona porque estableció su régimen a través del mal. No ha dejado una sola maldad en los últimos nueve o diez años, ha hecho todo tipo de males a las sociedades de Turquía. Pero Erdoğan no es un buen político. Es un mercenario de la guerra psicológica especial. Utiliza los recursos de todo el país para la guerra especial con el fin de mantener su propio poder y suprimir a los demócratas, así como la lucha del pueblo kurdo por la libertad. Esto es lo que Erdoğan piensa día y noche. En lo que piensa día y noche es en el mal. Lo hemos visto durante los últimos nueve, diez años.

Erdoğan debe ser entendido así. Una mala persona nunca puede ser un buen político. Esto se puede decir claramente de Erdoğan, que se presenta como una persona religiosa. No tiene religión porque no tiene conciencia. El principal aspecto de la religión es que apela a la conciencia y a la justicia. Erdoğan no tiene nada que ver con esto. Por eso no tiene religión. Las características más fundamentales de las religiones son los derechos, la justicia, la ley y la conciencia. Miles de millones de personas han adoptado estas religiones porque realmente siguen estos valores. ¿Los sigue Erdoğan?

No sabemos cuáles serán los resultados de la reunión Erdoğan-Ozel, pero estamos seguros de que Erdoğan sacará a colación la cuestión kurda. Intentará influir en Ozel diciendo que los kurdos están dividiendo Turquía, que son los enemigos de Turquía. Invitará a Ozel a adoptar una postura común contra el separatismo, “luchemos juntos”, dirá Erdoğan. Esto ya es una trampa. Esto es enemistad contra la democracia. Unirse contra la lucha del pueblo kurdo por la libertad significa oponerse a la democracia. Erdoğan atraerá a Ozgur Ozel a la enemistad de la democracia. Veremos cuál será el resultado.

Los pueblos de Turquía han rechazado las políticas del AKP-MHP. Se han posicionado en contra del gobierno actual y no les han votado. La actitud del pueblo es tan obvia como la del AKP-MHP. El pueblo realmente quiere la democratización. Quieren que se ponga fin a las políticas actuales. Están hartos. Por supuesto, de la oposición no esperan la continuación de la política actual, sino una actitud contraria a esa política; una política diferente que satisfaga las aspiraciones de democratización del pueblo de Turquía.