Merîvan es una de las ciudades más bellas de Rojhilat. Es una ciudad marcada por la resistencia, el patriotismo, la cultura y la historia. Es la ciudad donde nació y creció Kak Fuat Merîvan. El pueblo de Merîvan es un pueblo generoso que no se doblega ante los ataques y resiste. Aunque el Estado hace todo lo posible para que el pueblo dependa de él, los habitantes de Merîvan nunca llaman a la puerta del Estado y siguen trabajando en los viñedos, los jardines y con el ganado. Y es esta resistencia la que hace que el Estado ataque aún más a Merîvan.

Hay muchas leyendas sobre la ciudad de Merîvan. Una de ellas está relacionada con su nombre. Se dice que el nombre de Merîvan viene de los patos. Esto se debe a que hay muchas especies de patos en el lago de la región, Zeribar. También que el nombre Miravî o Merîvan en kurdo proviene de allí. Según otra leyenda, Merîvan proviene del nombre Mehrevan. El nombre Merîvan proviene de la región de Merh, o la región del amor. Según esta leyenda, fue llamado Merîvan por la hospitalidad de los habitantes de la región. Una tercera leyenda dice que después de que los omeyas destruyeran la zona, la región recibió el nombre de Merîvan porque los marwaníes emigraron de Bagdad a Sharezor y Merîvan.

La leyenda de los 12 jinetes

La guerrilla habla de la leyenda de Merîvan así: "Hay algunos símbolos especiales en Merîvan. Uno de ellos son los 12 jinetes. La característica del territorio de Merîvan es que en él viven muchos animales como cerdos, patos y cigüeñas. Los 12 jinetes son elegidos por Ehmedxanî Baba de entre el pueblo y se les encomienda la tarea de cazar a los cerdos. Sin duda, su único objetivo no es matar cerdos. Su objetivo principal es defender al pueblo. En otras palabras, a estos 12 soldados de caballería se les ha encomendado el deber de servir y defender a la sociedad. Se proponen defender al pueblo, pero son muy pocos frente al ejército enemigo. Así que desarrollan una táctica: atacarán de noche. Se dividen en varias secciones. Tambores, flautas, etc. Hacen ruido con sus instrumentos. El enemigo piensa que está siendo rodeado por un gran ejército debido al ruido. Los 12 soldados de caballería consiguen vencer a los safávidas. Estos 12 jinetes devotos son las personas que se dedican a su país y defienden sus tierras. Tienen una gran fuerza de voluntad. Estos 12 jinetes se convirtieron en un símbolo y su leyenda sigue muy viva en Merîvan.

Otra leyenda relacionada con Merîvan dice que las fuerzas de Feylekus atacaron a un derviche y se apoderaron de todas sus ganancias. Escaparon con su mujer, sus hijos y todas sus posesiones. El derviche acude al juez para quejarse de lo sucedido. Cuando le explica la situación, el juez se alegra porque también es aliado de Feylekus.

El derviche reza al pasar por el agua de Zirewarde y dice: "No me rebelaré hasta que se inunde esta ciudad". Por otra parte, Feylekus perseguía al pueblo de Merîvan día y noche. Sin embargo, a pesar de todo esto, el pueblo nunca acudió al tribunal para presentar una denuncia. Porque se resistían por sí mismos. Por mucho que el gobierno lo intente, no puede desprender a Merîvan de la cultura de la resistencia.