El Consejo de Educación de la Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria (AANES) emitió el martes una declaración en la que evalúa el impacto de los ataques turcos desde el 20 de noviembre en el sector educativo. Según el comunicado, unos 22.000 alumnos se han visto privados de la escolarización por este motivo.
El Consejo de Educación de la AANES condenó el bombardeo turco de las escuelas y dijo que estaba sembrando el miedo entre los estudiantes y los padres después de que una escuela de la aldea de Koran, al este de la ciudad de Kobanê, quedara completamente destruida y otras tres parcialmente dañadas.
Hace una semana, los pueblos de la periferia oriental de Kobanê fueron objeto de un intenso fuego de artillería. La escuela fue destruida y las casas residenciales también sufrieron daños.
Según la AANES, 21.843 estudiantes de las regiones de Afrîn, Kobanê, Cizîrê y Manbij no asisten a clase debido a los ataques. Además, ha habido que cerrar 243 escuelas según el comunicado.
El Consejo de Educación exige que las organizaciones internacionales que se ocupan de la educación y los derechos de los niños condenen los ataques turcos contra la población civil y las infraestructuras de la región autónoma del Norte y Este de Siria.