Los refugiados iraníes y de Rojhilat, que se encontraban entre los detenidos el 15 de diciembre cerca del puerto del distrito de Marmaris de Muğla, se enfrentan a la deportación. La Organización de Derechos Humanos Hengaw anunció que los activistas kurdos que se encuentran entre los refugiados detenidos corren el riesgo de ser deportados a Irán.
Según la información proporcionada por los abogados que se ocupan del asunto, aproximadamente 140 refugiados sirios, iraníes y de Rojhilat detenidos están recluidos en el Centro de Expulsión (GGM) del distrito de Ula, en Muğla. Los abogados dijeron que no podían entrar en el GGM y reunirse con los refugiados porque era fin de semana, y añadieron que tenían que esperar hasta el lunes.
Llamamiento a la solidaridad internacional
Entre los detenidos hay activistas de derechos humanos en Irán: El activista kurdo iraní Hossein Manbari (Amanj), Shugar Mohammadi, Naser Kamangar, Arzoo Molanaei y sus dos hijos, Sabah Nikkhah y su esposa Shallir, y sus dos hijos. Los abogados afirmaron que sus vidas correrían peligro si eran devueltos a Irán. Las organizaciones de derechos humanos pidieron la intervención inmediata de organizaciones e instituciones internacionales de derechos humanos.