La organización paraguas de la sociedad civil TEV-DEM (Movimiento por una Sociedad Democrática), fundada en Rojava en 2011, llamó la atención sobre la situación en Afrin, la región del norte de Siria, que fue ocupada por Turquía hace dos años, e hizo un llamado a la acción urgente.

Una declaración publicada por TEV-DEM hoy expresó lo siguiente:

“Existen acuerdos internacionales sobre la huida y el desplazamiento forzado, según los cuales es ilegal expulsar a grupos de personas de sus hogares. Estos también incluyen crímenes de guerra, genocidios y crímenes contra la humanidad. El artículo 49 del Cuarto Convenio de Ginebra, adoptado en 1949, prohíbe la expulsión de personas y pueblos en conflictos armados.

Los crímenes deben ser documentados y castigados

Las acciones del estado turco en Afrin y otras áreas, violan las fronteras sirias y constituyen un crimen de guerra según el derecho internacional. Por esta razón, los crímenes de Turquía deben ser documentados y llevados ante tribunales internacionales. El cambio demográfico en Afrin y otras áreas, constituye un genocidio étnico. Las personas que huyeron de Afrin viven en condiciones difíciles en Shehba y no reciben apoyo de ninguna institución internacional. Todas las organizaciones internacionales están observando lo que se está haciendo a las personas que lucharon contra el terrorismo y lo derrotaron por el mundo.

Afrin está destinado a anexarse ​​y convertirse en un centro terrorista.

El estado turco ni siquiera se adhiere a las normas legales internacionales básicas. Es una violación del derecho internacional cuando un estado destruye sitios históricos, naturaleza, historia, tradiciones y costumbres en un territorio que ocupa. La intención del estado turco es clara. Quiere separarAfrin de Siria y anexárselo. Si un estado ocupa partes de otro estado y realiza un intercambio de población, es un crimen de guerra contra la humanidad.

Hay 18 millones de olivos en la región de Afrin. Son el símbolo y la principal fuente de ingresos para la población local. Estos árboles se talan para expulsar a la población. Olivares enteros se queman. Al mismo tiempo, los bienes culturales históricos son robados y llevados a Turquía o a áreas controladas por organizaciones terroristas radicales.

El régimen terrorista en Turquía quiere hacer de Afrin un pequeño estado terrorista en nombre del Islam. Pretende convertirlo en un centro donde los terroristas son entrenados y enviados al mundo. Esto tiene como objetivo chantajear a Europa y a los países árabes. Al igual que Libia, Afrin se juega como una carta de triunfo en conversaciones con otros países.

Derecho internacional y obligaciones éticas de la comunidad internacional

Por su silencio sobre este tema, la comunidad internacional se está haciendo cómplice de los crímenes turcos. Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que cumpla con su obligación legal y ética. Como TEV-DEM, consideramos que las Naciones Unidas y Rusia son directamente responsables de los crímenes de guerra en Afrin. Hacemos un llamado a todo el mundo a enfrentarse al estado turco gobernado por Erdogan, que proporciona una base para los terroristas y los envía a Libia, Europa y otros países. Hacemos un llamado al estado sirio, en vista de las invasiones a su soberanía, para cumplir con sus obligaciones constitucionales y nacionales y llevar los crímenes cometidos contra los ciudadanos sirios ante los tribunales internacionales.

Hacemos un llamado a la gente a continuar protestando contra la ocupación y a exigir la paz en todas partes. No hay otra manera que luchar contra el fascismo del estado turco liderado por el sultán de los terroristas, Erdogan”.

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