El 20 de enero, el mayor ataque del ISIS en mucho tiempo causó sensación más allá de Rojava. Cientos de mercenarios que se habían infiltrado en Rojava desde la zona ocupada por Turquía en el norte de Siria e Irak atacaron la prisión de Sina en Hesekê con el objetivo de liberar a los aproximadamente 4.200 mercenarios del ISIS allí encarcelados, que habían lanzado una insurgencia al mismo tiempo, y crear el núcleo para un nuevo dominio territorial del ISIS. El ataque fue sofocado por las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) y la Asayîş con el apoyo aéreo de Estados Unidos tras días de combates y cientos de muertos y heridos.

El “gobernador del ISIS” se encuentra en el territorio ocupado por Turquía

Según un informe de la agencia de noticias ANHA, el mercenario del ISIS capturado, Abdullah Ismail Ahmad, era corresponsable de la operación a nivel de liderazgo. Ahmad recibió instrucciones de “un gobernador del ISIS” llamado Abdul Azizi. Actualmente se encuentra en la zona ocupada en torno a Serêkaniyê y Girê Spî, y colabora estrechamente con el servicio de inteligencia turco MIT.

Esta afirmación no es en absoluto descabellada, ya que existen pruebas de que muchos comandantes de alto rango del ISIS permanecen en zonas ocupadas por Turquía en Siria y Rojava. Por ejemplo, “el califa del ISIS” Abu Ibrahim al-Hashimi al-Quraishi fue abatido en febrero durante una operación de la Coalición liderada por los Estados Unidos contra el ISIS en una zona entre Afrin e Idlib “controlada” por Ankara en cooperación con la rama de al-Qaeda HTS. Había tres puestos militares del ejército turco a menos de 200 metros de su casa. Según el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se cree que Al Quraishi también fue responsable del asalto del ISIS a la prisión de Hesekê. Su predecesor, Abu Bakr al-Baghdadi, también fue asesinado en Idlib en otoño de 2019.

El ataque fracasó gracias a la intervención de las SDF

Abdullah Ismail Ahmad informó en su testimonio de que durante el intento de asalto a la prisión de Sina, algunos de los mercenarios del ISIS consiguieron escapar al barrio de Xiwêran. Allí, al parecer, se quedaron cerca de una mezquita. Sin embargo, una vez que las SDF se hicieron con el control de la situación, no les fue posible volver a contactar con los fugados. Los fugados fueron rodeados por las SDF y murieron en combate.

El objetivo del ataque al centro de detención era liberar “a ciertas personas” del cautiverio, sembrar el miedo y el terror, tomar el control de Hesekê y proclamar la ciudad como nuevo centro del “califato”. Posteriormente, se ocuparían otras zonas y se reconstruiría el ISIS. Para ello, había que utilizar a los mercenarios fugados de las cárceles y crear una nueva fuerza militar del autodenominado “Estado Islámico”. Y para ello reunió el ISIS a todas sus unidades y pidió apoyo a otras regiones.

‘El MIT nos envió las armas’

Mientras tanto, el MIT suministró armas a los mercenarios en el campamento de recepción e internamiento de Hol. El objetivo era crear el caos en el campamento mediante asesinatos y ataques. Sin embargo, con la exitosa intervención de las SDF, el plan fracasó en su planteamiento. Las redes de contrabando del MIT en el campamento de Hol han sido desbaratadas una y otra vez.

Al comentar los preparativos para el ataque en Hesekê, Ahmad dijo: “Recibimos la orden de una persona llamada Abdul Aziz y lanzamos la operación. El objetivo era derrotar a las SDF. Preparamos armas, municiones y trampas explosivas. Para documentar nuestra operación, instalamos cámaras. Tres grupos prepararon esta operación. Cada grupo estaba formado por dos personas. Las armas, las trampas explosivas y las cámaras fueron entregadas a estas personas”. Según el comandante del ISIS, el primer grupo debía observar la carretera entre Hesekê y Deir ez-Zor y apuntar a todos los vehículos de las SDF y de la Administración Autónoma.

El segundo grupo debía operar en Hesekê y atacar vehículos militares y puestos de control. El tercer grupo estaba en movimiento permanente en Shaddadi, atacando puestos de control, vehículos y civiles.

Además, Abdul Aziz ordenó atacar a figuras conocidas. Abdullah Ismail Ahmad estaba también sobre el terreno con una unidad del ISIS para este fin.

El papel del MIT está documentado

Ahmad fue capturado el 14 de abril durante una operación de las SDF. Se le encontraron grandes cantidades de explosivos, armas y municiones. Durante la investigación, salieron a la luz documentos e información que demostraban que el mercenario era dirigido como comandante del ISIS desde una base de operaciones en Turquía establecida por el MIT. La captura de Ahmad evitó una importante amenaza para la región.

Financiación de Turquía

Las declaraciones del mercenario del ISIS capturado también apoyan la evidencia de un vínculo con el Estado turco. Afirmó que las reuniones de preparación del atentado tuvieron lugar principalmente en las zonas ocupadas por Turquía en el Norte y el Este de Siria. “Ciertos individuos en Turquía financiaron las células del ISIS en las zonas controladas por la Administración Autónoma. Estos individuos tienen estrechos vínculos con las agencias de seguridad de Turquía. Tanto el atentado como las actividades generales del ISIS en la región están financiadas por altos funcionarios de seguridad”, dijo.