El ejército turco invasor y sus mercenarios siguen presionando a los pueblos del Norte y el Este de Siria. El flujo de agua de la estación de Alouk, que suministra agua potable a millones de personas que viven en el cantón de Hesekê, ha vuelto a ser interrumpido. Según la información obtenida, desde hace dos días no se suministra agua a la ciudad porque los mercenarios cortaron la electricidad de las bombas de agua.

Se ha sabido que los mercenarios también han cortado la electricidad que va al distrito de Dirbesiyê sin dar explicación alguna.

Los equipos que intentaron acudir a la zona para arreglar las averías provocadas por los cortes de electricidad también fueron bloqueados por los mercenarios.

Desde la ocupación de Serêkaniyê, el agua de la estación de Alouk ha sido cortada al menos 20 veces por el Estado turco.

Aproximadamente un millón y medio de personas viven en el cantón de Hesekê, sus distritos y campamentos, y dependen del suministro de agua de esta estación.