En la ciudad de Hesekê, al noreste de Siria, casi toda la población de la ciudad salió a la calle el lunes para protestar contra la invasión de Turquía, socio de la OTAN, y su ejército mercenario yihadista en Rojava. Activistas de la organización paraguas de mujeres kurdas Kongreya Star, miembros del Consejo Democrático Sirio (MSD), representantes de la sociedad civil y profesores y sus alumnos también participaron en la poderosa manifestación.

El pueblo expresó en repetidas ocasiones que sólo aceptaría a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) como fuerza defensiva. "Si es necesario, nos moveremos a los frentes y lucharemos junto a los combatientes de las SDF*", declararon los manifestantes.

La marcha pasó por el centro de Hesekê. En un discurso, el combatiente de las SDF Sozê Qamişlo explicó: "Los invasores saben muy bien quienes somos. Somos los habitantes legítimos de estas regiones y hemos sacrificado a miles de mártires por su defensa. Y también en este momento son de nuevo las mujeres revolucionarias bajo cuya dirección se construye una gran resistencia en Serêkaniyê".

En su discurso, Sozê Qamişlo también señaló que todos los componentes de la población del norte y el este de Siria participan en la resistencia contra la ocupación. "Por esta razón, recuerdo con respeto y gratitud a los que dieron su vida en la lucha al lado del pueblo kurdo".

La manifestación terminó con consignas que señalaban que la resistencia conjunta por la Rojava continuaría hasta la liberación de todas las regiones del norte y este de Siria.